Un niño de dos años muere al ser atropellado por sus padres

Un niño de dos años falleció ayer en el municipio guipuzcoano de Beasain como consecuencia de las graves lesiones que sufrió tras ser atropellado por un vehículo, a cuyo volante se encontraba uno de sus padres.

El suceso tuvo lugar sobre las ocho de la tarde, en terrenos del caserío Argoin, en el barrio beasaindarra de Garin, al que se accede a través de la carretera del embalse de Arriaran. En circunstancias que la Ertzaintza investiga, un todoterreno que, al parecer, realizaba una maniobra cerca de la vivienda atropelló al menor. La Policía vasca trataba anoche de determinar si en el momento de los hechos, el coche era conducido por la madre del niño o por el padre. En cualquiera de los casos, ninguno de ellos se percató de que su hijo se encontraba en la trayectoria del vehículo.

Al lugar se trasladaron efectivos de una ambulancia de Osakidetza que atendieron en primera instancia al pequeño. Sin embargo, dada la grave situación en la que se encontraba la víctima se requirió la presencia de una segunda unidad, esta vez una medicalizada del Servicio Vasco de Salud. El personal sanitario trató con todos sus medios de mantener al niño con vida y conseguir su reanimación. Sin embargo, todos los esfuerzos resultaron infructuosos y el menor falleció poco después en el lugar de los hechos.

El cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de San Sebastián, donde hoy se le practicará la autopsia. Tras el atropello, los padres del niño sufrieron sendas crisis nerviosa y tuvieron que ser asistidos por el personal sanitario que se había desplazado al lugar del siniestro y posteriormente fueron trasladados al hospital. Unidades de la Ertzaintza se trasladaron también a la zona a fin de confeccionar el atestado que, una vez esté ultimado, será trasladado al juzgado de Tolosa. La noticia de la trágica muerte del niño causó un profundo impacto en este pequeño barrio rural beasaindarra, donde todos vecinos se conocen.