Zapatero es ovacionado por los simpatizantes socialistas a su llegada al pabellón Príncipe de Asturias de Murcia. :: VICENTE VICENS
ESPAÑA

Zapatero cree haber desarmado a Rajoy con su renuncia a la candidatura

Afirma que el PP ahora tendrá que trabajar en un proyecto distinto al 'pim, pam, pum' contra el presidente

MURCIA. Actualizado: Guardar
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José Luis Rodríguez Zapatero. El día después. Será preciso esperar aún un tiempo antes de ver hasta qué punto la decisión del presidente del Gobierno de anunciar ya que no será candidato en las generales de 2012 tendrá el efecto buscado, pero él ya se da por satisfecho. El secretario general de los socialistas cree haber desmontado por completo la estrategia electoral con la que Mariano Rajoy pretendía hacer que todos los pronósticos, tanto para las autonómicas como para las generales, se cumplieran. Porque se ha quedado sin 'pim, pam, pum'.

«Sabéis que soy una persona con tendencia positiva y esta mañana pensaba que la decisión que tomé ayer le va a venir muy bien al PP-dijo irónico a quienes asistieron a su primer mitin como excandidato del PSOE- porque se va a tener que poner a trabajar en un proyecto».

Hace mucho tiempo que Zapatero sostiene que el primer partido de la oposición se lo ha jugado todo a un discurso ramplón, que consiste en hacerle culpable de todos los males. «No han hecho más que atacarme y atacarme; da igual un 'tsunami', que pase lo que pase en el mundo árabe...ellos lo tienen clarísimo -insistió-; pues ahora Rajoy se va tener que poner a trabajar».

Por eso resultaba tan importante para el jefe del Ejecutivo el factor sorpresa. En el PP no cabía la más mínima duda de que no aspiraría a la reelección, pero no le creían capaz de abrir el melón sucesorio ya, aunque fuera de este modo, con el compromiso de que el proceso de elección del candidato no se convocará hasta que hayan pasado las elecciones locales y autonómicas del 22 de mayo. Zapatero quería coger desprevenido al adversario y no le importó encargar para ello al secretario de Organización del PSOE, Marcelino Iglesias, que mintiera hace una semana y diera a entender que en el Comité Federal de ayer no habría ningún anuncio especial.

Pero además de dejar sin referente a los populares, en la jugada del presidente hay algo más. Entre los dirigentes socialistas hacía meses que circulaba la tesis defendida por algunos sociólogos de que quien cambiara el candidato ganaría las elecciones. El jefe del Ejecutivo está muy desgastado, pero nunca con semejante pulsión de cambio asomando en las encuestas un líder de la oposición ha tenido peor valoración que la que tiene el presidente del PP. Y también desde esa misma óptica el PSOE cree haber ganado ya una mano.

Esfuerzo nacional

Zapatero argumentó en Murcia, auténtico bastión popular desde hace muchos años, que como presidente del Gobierno se hace cargo de los problemas que más preocupan a los ciudadanos y admitió que el Ejecutivo «tiene muchas responsabilidades, casi todas si queréis», dijo, en los elevados índices de desempleo que se han producido, sobre todo, en la construcción. «Pero, hombre -se defendió- los planes urbanísticos de los municipios costeros no los he hecho yo, ni las licencias para construir».

Ahora, liberado del debate de su candidatura, se siente más libre para repartir culpas. Y también, según dio a entender, para acometer todas las medidas que sean necesarias para afianzar una recuperación económica que, según sostiene, ya ha empezado. En esto, hizo especial hincapié. Con una frase que augura nuevos ajustes, como ya se desprende de los acuerdos alcanzados en el último Consejo Europeo, advirtió de que será necesario un «esfuerzo nacional» en el que deben estar implicados empresarios y sindicatos. «Y lo digo -apuntaló- cuando todo el mundo sabe ya que lo único que me mueve es ver en uno o dos años una economía competitiva y capaz de crear empleo».

«No será rápido ni fácil, pero puedo aseguraros que el Gobierno está haciendo lo que tiene que hacer pensando en el futuro de España y no pensando en nada más que eso», insistió.

Tras el mensaje realista, llegó el esperanzador. Zapatero se dirigió a la candidata autonómica para asegurarle que aún está a tiempo de «dar la vuelta» a las encuestas. Y se puso como ejemplo. Recordó que cuando comenzó su andadura como secretario general del PSOE desde el PP le llamaban «Bambi» y luego ganó dos elecciones generales consecutivas. «Nadie creía que yo podía ganar -recordó-, pero con humildad, y un pelín de proyecto y de partido, se ganan las cosas». Claro que en Murcia el PP goza de una mayoría absoluta aplastante y parece que será mayor el 22 de mayo.