Los rostros de tensión y de cansancio se adivinaban entre los asistentes ayer a la asamblea extraordinaria. :: L. V.
Jerez

Intentos de última hora y tensiones hasta el final

La dirección regional se reunió ayer con algunos independientes y los nombres bailaron de la lista hasta minutos antes de ser votada

JEREZ. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El resultado de la votación de la lista, más igualado de lo que hubiera deseado la secretaria local de los socialistas, ya evidenció anoche a las claras que ni siquiera al final del proceso de elaboración de la candidatura iba a haber tranquilidad para el PSOE de Jerez.

Y es que el fin de semana ha sido de infarto para los socialistas, que de la convención celebrada en Málaga se fueron el domingo directos a la sede del partido para seguir haciendo quinielas con los nombres que tenían sobre la mesa y entre los que no aparecían los independientes de los que había hablado expresamente la secretaria de Organización del PSOE andaluz, Susana Díaz.

Fue precisamente la mano derecha de José Antonio Griñán la que protagonizó ayer algún último intento de 'fichar' para la lista de Pilar Sánchez a algún independiente, es decir, personas no adscritas al partido, para que ocupara alguno de los puestos más importantes de la candidatura final.

Sin embargo, en la lista finalmente los que han quedado son los militantes del partido, especialmente los que ya han ocupado puestos de gobierno en la anterior legislatura. Eso sí, ni rastro de los más críticos con la actual primera edil, muchos de los cuales comparecieron ayer en la asamblea solo para dar su voto negativo a la lista propuesta como miembros que son de la ejecutiva (tuvo un total de 12 votos en contra en ese punto).

Pero ni siquiera eso calmó ayer los ánimos de los dirigentes del partido, que estuvieron reunidos hasta el último momento encajando las piezas y tratando de calmar los ánimos de unos y otros (con espantadas y almuerzos terapéuticos de por medio). Y es que tampoco hubo demasiado consenso respecto a qué puesto quería ocupar cada uno, en particular por parte de aquellos que han estado junto a Pilar Sánchez durante estos cuatro años y esperaban una mejor posición de salida.

En este sentido, uno de los casos reseñables es el de la asesora municipal Carmen Omist, fiel al proyecto, que siempre estuvo en la terna final pero cuyo nombre finalmente se cayó de la lista definitiva. Según diversas fuentes consultadas, Omist, descontenta con su puesto, pidió finalmente que se la dejara fuera.

También hubo algún amago de protesta entre algunos militantes, que trataron de pegar durante la votación carteles con el lema «Por una lista de integración. Más democracia interna», pero a los que conminaron a no repartir sus panfletos durante la elección.

Al final, al filo de la hora de la asamblea, muchas caras de tensión, miradas de reojo y rostros de cansancio entre los que llevan varios días haciendo ingeniería electoral para cuadrar una candidatura que todavía está por ver que sirva para sumar sensibilidades y hacer olvidar rencores en los apenas 60 días que quedan hasta el 22-M. Por lo visto ayer, será complicado.

La propia valoración de la alcaldesa sobre la lista final, no demasiado entusiasta, apuntaba que queda trabajo por hacer. Y es que Sánchez, que destacó los 12 votos en contra en la ejecutiva de «los de siempre», solo pudo hacer hincapié ayer en nombres como el de Abraham Granadino, uno de los jóvenes valores de la lista, con el que dijo que «se le hace un guiño a los empresarios y autónomos».