UGT se desmarca del altercado ocurrido en la visita del consejero
JEREZ. Actualizado: GuardarLa Sección Sindical de UGT en el Ayuntamiento de Jerez, tras la manifestación del pasado día 16, ha querido felicitar a los empleados municipales por su masiva participación y su conducta. A través de un comunicado, desde el sindicato han confiado en que «este acto democrático sirva para llamar la atención de la clase política y que se den soluciones a la situación de incertidumbre que padecen los empleados municipales en el cobro de las nóminas».
En este sentido, exigen al gobierno local que se siente con los órganos de representación sindical para que entre todos puedan aportar las posibles soluciones. Por otro lado, desde UGT aprovechan para criticar que «se utilice la unidad sindical para los intereses políticos de determinados sindicatos».
Así, aseguran que en una reunión previa se había acordado con respecto a la manifestación el itinerario, el lema de la pancarta, los portadores de la misma, el texto del manifiesto y dónde había que leerlo. A pesar de ello, afirman que los portavoces de la junta de personal y del comité de empresa de forma unilateral cambiaron el lugar donde se leyó el manifiesto y también el itinerario de la protesta, para hacerla coincidir con la sede del PSOE y «montar el circo mediático al que acostumbran tanto CGT como SIP».
Ésta es la razón por la que los representantes de UGT abandonaron la manifestación, al entender que querían utilizarlos por intereses políticos, «máxime cuando el día 17 miembros de CGT estaban reunidos con dirigentes de un partido». En cuanto a las concentraciones, también destacan que la comisión de portavoces acordó que fuesen pacíficas, apolíticas y con respeto a las personas, y sobre todo a los compañeros que se encontraban trabajando. Por ello, no dudan en reprobar la actitud de José García, dirigente sindical de CGT, que llamó «nazis y sinvergüenzas» a los agentes de la Policía Local, además de los incidentes ocurridos el pasado 18 ante la visita del Consejero de Educación, tachándolos de «desproporcionados».