![](/cadiz/prensa/noticias/201103/18/fotos/5489108.jpg)
Los indios quieren ser blancos
La obsesión por aclarar la piel se extiende por todas las clases sociales y genera un colosal negocio en el subcontinente
NUEVA DELHI. Actualizado: GuardarLos tratamientos para blanquear la piel triunfan en el mercado cosmético de la India, donde la obsesión por tener un rostro claro enlaza con nociones de estatus social, éxito y riqueza que son fomentadas por el cine, la televisión y las revistas.
Espumas, cremas, mascarillas, lociones para después del afeitado, maquillaje y hasta desodorantes «blanqueadores» son algunos de los productos más demandados por los indios, que tampoco dudan a la hora de someterse a tratamientos más agresivos como dermoabrasiones faciales, 'peelings' químicos y láser. «Hoy en día, todo el mundo quiere ser blanco y guapo», explica Kiran, la responsable de un popular salón de belleza delhí.
Los indios con menos recursos esquivan los rayos solares buscando la sombra durante el largo verano y, sobre todo las mujeres, se cubren con paraguas mientras caminan y se tapan manos y brazos con largos guantes.
Para la clase media cada vez más numerosa, hay cremas en el mercado desde 150 rupias (unos 3,3 dólares) y multitud de clínicas de estética y dermatológicas con propuestas más radicales. «La mayoría de los productos mencionan 'blanqueador', y con esta palabra se venden como churros», asegura Kiran, quien añade que tienen «gran demanda» entre sus clientes.
La invasión publicitaria de estos cosméticos revela la potencia de un mercado que crece un 18% al año. Con un valor potencial de 4.000 millones de dólares, según la Cámara India de Comercio, el negocio aumenta de forma imparable y, últimamente, sobre todo entre la población masculina, asegura un empresario. Y hasta las más reconocidas estrellas de Bollywood, como el atractivo Shah Rukh Khan y la bella Sonam Kapoor, ofrecen sus rostros a los anuncios de cosméticos blanqueadores.
El culto a la piel blanca forma parte del imaginario colectivo de la sociedad india, que tiene una estructura de castas muy arraigada y que relaciona a las personas de tez oscura con las clases más bajas, explicó a Efe el psicoanalista indio Sudhir Kakar. «No hay un solo sector social inmune al encanto de la piel clara», dice Kakar, que lo asocia con los invasores arios que conquistaron su territorio en la antigüedad. Hasta las deidades hindúes, observa, responden a la creencia popular: el único dios de piel oscura, Krishna, es de la casta más baja y la diosa Kali (negra, en hindi) es la versión terrible de la pálida Durga. Así, es normal ver anuncios en televisión que garantizan un trabajo mejor para los hombres de piel clara, o anuncios matrimoniales en prensa que especifican el deseo de encontrar una pareja así, o consejos a las mujeres embarazadas para que tomen leche con azafrán, remedio popular para dar a luz a hijos más blancos.
«Esta moda viene de las películas occidentales. Y es común a todas las clases económicas de la India, es algo que está en la mentalidad», afirma Kiran. Obviamente, el proceso para lograr la piel blanca deseada no es fácil, admite esta esteticista. «No puedes crear una Blancanieves en dos días», suspira.