Etura y Colell, en la terna de González Macho

El productor, distribuidor y exhibidor Enrique González Macho pasó de las palabras a los hechos y presentó el jueves su candidatura a la presidencia de la Academia de Cine. Le acompañan como vicepresidentas la donostiarra Marta Etura y la catalana Judith Colell, que aceptaron «embarcarse en esta aventura». González Macho y sus compañeras de terna pelearán en las elecciones del 10 de abril con Bigas Luna, la actriz Leonor Watling y el director de producción Yousaf Bokhari. González Macho se mostró encantado de esta competencia. «La otra candidatura es espléndida. La forma gente tan respetada, querida u odiada como podamos ser nosotros», recalcó durante la presentación.

El productor cántabro, uno de los referentes del cine español, indicó que su Academia, en caso de que el día 22 de marzo se apruebe su candidatura, será «apolítica e integradora» y respetará las opiniones «de todos sus miembros». González Macho no quiso dar muchos detalles sobre su programa si es elegido presidente para los próximos tres años.

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La Academia de González Macho será «integradora, no que cualquiera sea miembro, pero sí acercarnos a todos los que tienen que ver con la industria». En definitiva, que se convierta en un foro que «aporte, que tenga contenidos» y donde tenga cabida todo el cine español. «Deben existir desde los 'torrentes' hasta la película minoritaria que se pasea por 80 festivales y de la que aun hablemos dentro quince años», señaló Judith Colell, premio especial del jurado en el último Festival de San Sebastián por 'Elisa K', codirigida con Jordi Cadena.

El productor y distribuidor también desechó que la institución deba tener un papel activo en la creación de leyes, como pareció con el lío de la 'ley Sinde'. «La Academia de Cine no legisla, para eso está el Congreso. La Academia debate, eso que quede muy claro. Debe tener su personalidad y preguntar a sus miembros», apuntó el productor. En cuanto a la polémica norma, González Macho se mostró muy cauto sobre su aplicación. «Todavía es un embrión. En 2007, se promulgó la Ley del Cine y todavía no está vigente en su totalidad. Es un embrión de algo que todavía no está hecho. A veces crece mucho y a veces se queda en un aborto».