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«Soy adoptado y no sé si me robaron»

Hijos adoptivos que sospechan que fueron arrebatados al nacer acuden a la Comisaría linense para ceder su ADN

S. TUBIO
CÁDIZ.Actualizado:

Cada una de las historias que investiga la Policía tiene dos cabos que deben unir: una familia que busca a un adulto que dieron por muerto hace años y un adulto que puede sospechar, o no, haber sido víctima de una adopción irregular. A la Comisaría de La Línea le están llegando ya los primeros hijos adoptivos dispuestos a ceder su ADN. En algunos casos, su familia no biológica, con el paso de los años, les confesó que llegó a sus vidas de forma poco ortodoxa y bastante ilegal. Sin embargo, hay otros que viven aún entre dudas. Sobre los tres bebés que han sido identificados en La Línea, fuentes del Ministerio Público se negaron el pasado miércoles a aportar más datos porque los propios afectados desconocen aún una dura confirmación: fueron robados a las pocas horas de vida.

El detective privado Rafael Carrasco también ha tenido una participación activa en la localización de adoptados irregulares. Una de las pistas que ha seguido se la aportaron los certificados de defunción o legajos que algunas familias tenían consigo como supuesta prueba del fallecimiento. En algunos de ellos, por error, se había «colado» el nombre de la madre que se quedaba finalmente con el bebé. Al rastrear el historial de la mujer, constató que no había rastro de ella en los historiales de ingreso. A través de esos nombres ha podido llegar a varios supuestos bebés robados. Sin embargo, al contactar con ellos, en muchas ocasiones se encuentra con una primera respuesta: no quieren saber nada y solo reconocen a una familia.