Sube la presión del mercado y la tensión política en Portugal
Los intereses de la deuda han escalado de nuevo en una subasta de bonos, mientras la tensión política entre el Gobierno y la oposición amenaza la aprobación de más medidas de austeridad anunciadas por el Ejecutivo
LISBOAActualizado:Los intereses de la deuda de Portugal han escalado de nuevo en una subasta de bonos, mientras la tensión política entre el Gobierno socialista y la oposición amenaza la aprobación de más medidas de austeridad anunciadas por el Ejecutivo. Portugal colocó 1.000 millones de euros en deuda a doce meses a un interés que subió del 4,05 % de la última emisión similar hasta el 4,33 %, y con una demanda superior a la oferta en 2,2 veces, frente a las tres de la anterior subasta, el 2 de marzo.
La operación se produjo sólo unas horas después de que la agencia de calificación financiera Moody's anunciara una rebaja en dos escalones de la deuda pública lusa, de A1 a A3, por las dificultades que afronta la economía del país. Pero el agravamiento que sufrieron las condiciones de financiación de Portugal fue relacionado por el Gobierno no con Moody's sino con el "ambiente de inseguridad política" creado por el rechazo de la oposición a respaldar el paquete de austeridad que presentó por sorpresa el viernes.
El desencuentro por ese nuevo plan de ajuste entre el Ejecutivo minoritario del primer ministro, José Sócrates, y la oposición conservadora ha vuelto a desatar los rumores de que Portugal se vea abocado a solicitar ayuda financiera internacional. El ministro de Finanzas, Fernando Teixeira dos Santos, alertó de que de si ese programa no se aprueba en el Parlamento, donde será presentado la próxima semana, Portugal se vería "empujado" a pedir un rescate y se agravarían las condiciones de vida de sus ciudadanos.
Las limitadas posibilidades de crecimiento del país, los riesgos en la aplicación del saneamiento presupuestario, las dificultades de acceso a la financiación y la posibilidad de que el Gobierno deba ayudar a la banca, son los peores riesgos de la economía portuguesa identificados en el análisis divulgado por Moody's.
Teixeira dos Santos consideró el recorte de nota de esta agencia "esperado" aunque "precipitado" y afirmó que debió esperar a los resultados sobre la crisis de la deuda en la cumbre de la UE de los próximos 24 y 25 de marzo.
Nueva batería de medidas de ajuste
La penalización de los bonos del Tesoro luso a 10 años subía hoy en el mercado secundario cuatro puntos base, hasta el 7,45 %, mientras los títulos a cinco años se situaban en el 7,76 %. El mercado no ha valorado lo suficiente la nueva batería de medidas de ajuste, que se unen a los cortes de salario de los funcionarios, el gasto y la inversión estatal y la subida de impuestos aplicada en enero.
Las medidas anunciadas el viernes incluyen un gravamen especial a las pensiones a partir de 1.500 euros y una reducción general de los costes en los servicios sociales, entre otros ajustes, para rebajar los costes de la Administración.
El Ejecutivo de José Sócrates, en minoría parlamentaria, necesita de al menos la abstención de los conservadores lusos para aprobar en la Asamblea Legislativa su plan, con el que busca generar confianza en la economía lusa y evitar una intervención externa. Sin embargo el principal partido de la oposición, el Social Demócrata (PSD, centro-derecha), que pactó con el Gobierno las anteriores medidas de ajuste, anunció el fin de semana pasado que no va a respaldar el nuevo paquete por no haber sido consensuado antes de su presentación a Bruselas.
Sócrates acusó el martes al PSD de buscar, con esa actitud, una crisis política que puede obligar a Portugal a una intervención financiera y alertó de que no quiere "pasar por lo que están pasando los griegos y los irlandeses". Según el Gobierno, la aplicación de su programa de ajustes es "fundamental" para reducir el déficit del 7,3 por ciento del PIB hasta el 4,6 % en 2011, al 3 % en 2012 y al 2 % en 2013 y cumplir así las metas trazadas por Bruselas.