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Un bombardeo de la aviación de Gadafi ataca una posición de los sublevados cerca de la localidad de Ras Lanuf. :: AFP
MUNDO

La UE reconoce al Gobierno rebelde libio

Los Veintisiete avalan como «interlocutor político» al Consejo de Transición y mantienen sobre la mesa la alternativa militar

IÑAKI CASTRO CORRESPONSAL
BRUSELAS.Actualizado:

La UE otorgó ayer todo su respaldo institucional al recién creado Consejo Nacional de Transición Libio. En una cumbre extraordinaria convocada en Bruselas para analizar el conflicto desatado en el país norteafricano, los presidentes comunitarios acordaron inhabilitar oficialmente a Muamar Gadafi y reconocer al Ejecutivo rebelde como «interlocutor político». Los mandatarios europeos, que volvieron a exigir la marcha del dictador, dejaron la puerta abierta a una intervención militar sin el aval de Naciones Unides, aunque esa opción no se contempla a corto plazo.

La cumbre de ayer se presentaba en cierta medida como un pulso interno de la UE. Reino Unido y Francia se habían constituido en el polo más beligerante y reclamaban pasos contundentes para forzar la renuncia de Gadafi. Nicolas Sarkozy sorprendió de nuevo por la mañana al apostar por ataques «defensivos» si el régimen emplea «armas químicas o la aviación contra ciudadanos que se manifiesten sin violencia». Solo la mención de arsenales de esa naturaleza activó todas las alarmas, pero el líder galo matizó posteriormente que no contaba con «informaciones precisas».

Alemania abanderaba el grupo de los países más contenidos junto a otros socios comunitarios del este. Angela Merkel aseguró después de las deliberaciones que era «escéptica» sobre la imposición de una zona de exclusión aérea, otra de las medidas de fuerza respaldadas por el eje franco-británico. Además, remarcó que no veía la «necesidad» de recurrir a una acción militar. España se situó en un terreno neutral y defendió ante todo el papel de la ONU como foro imprescindible para articular una respuesta armada.

Ante este panorama, el punto de encuentro más asequible para continuar estrechando el cerco sobre Gadafi era fortalecer, al menos políticamente, a los rebeldes. Los Veintisiete pactaron reconocer como «interlocutores válidos» a los representantes del Consejo de Transición Libio, encabezado por el exministro de Justicia de Gadafi. Cuestionado sobre la credibilidad de figuras tan cercanas al dictador, el presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, subrayó como uno de sus avales su «ruptura» con el régimen. «Son personas que están arriesgando su vidas y para nosotros son suficientemente creíbles», agregó.

«Corta reunión»

Con su apoyo a los opositores, la UE persigue que se pueda abrir a corto plazo una «transición ordenada hacia la democracia». De todas formas, los Veintisiete no van tan lejos como Francia, que el jueves anunció incluso un próximo intercambio de embajadores que se instalarán en París y Bengasi. Van Rompuy detalló que ya ayer había mantenido una «corta reunión» con los representantes del Consejo de Transición.

El otro gran acuerdo que alcanzaron los Veintisiete es en realidad un nítido mensaje a Gadafi. Siguiendo la estela de la OTAN, los socios comunitarios mantienen abierta la opción militar, pero con tres condiciones. Se exige para aprobar una intervención una «necesidad demostrable, una clara base legal y el apoyo de la región». El jueves, los miembros de la Alianza especificaron que el respaldo jurídico debía proceder del Consejo de Seguridad. Ayer, la UE rechazó concretar esta opción, lo que podría conducir a una acción sin necesidad de contar con la aprobación de China y Rusia.

Los socios comunitarios, en cambio, sí que insistieron en forjar un acuerdo con la Liga Árabe e incluso la Unión Africana. Los ministros de Exteriores del primer organismo se reúnen precisamente hoy para debatir la posibilidad de imponer una zona de exclusión aérea, una de las peticiones más repetidas de los rebeldes. La UE anunció que ha convocado una cumbre tanto con los representantes del mundo árabe como con los africanos para avanzar juntos en la adopción de medidas.