El sucesor de Guerrero en Empleo defiende que actuó dentro de la legalidad

El consejero de Empleo, Manuel Recio, admitió el pasado jueves que las irregularidades en los ERE investigados no sólo se produjeron en la etapa del ex director general de Empleo y Seguridad Social, Javier Guerrero, sino también en la de su sucesor, Juan Márquez.

La portavoz del PP, Esperanza Oña, utilizó ayer este dato para pedir la dimisión de Recio por «encubridor», ya que Marquez fue director general con Recio durante unos días. «Ya no se puede decir que el pillo es Guerrero, ya que sabemos que el siguiente director general de Trabajo también introdujo a dos intrusos, uno de ellos el ex delegado de Empleo de la Junta en Sevilla Juan Rodríguez Cordobés, al que introdujo en la empresa Calderinox, donde nunca trabajó», manifestó haciéndose eco de lo que publicó 'El País'.

Márquez defendió ayer la legalidad de sus actuaciones en los dos años que estuvo en Empleo (2008-2010) en un comunicado remitido a Europa Press por la tarde. «En ningún momento he ordenado, facilitado o facultado para proceder de manera irregular en el desempeño de mis competencias», argumentó Márquez, quien se atribuye haber modificado el procedimiento de concesión de las ayudas para «dar seguridad jurídica a los beneficiarios» y «hacer un seguimiento 'a posteriori' que garantizase el correcto y diligente uso» de las mismas.

El ex director general de Trabajo llama a no confundir «entre resolución de expedientes de regulación de empleo y ayudas socio-laborales a trabajadores afectados por estos expedientes, que son gestionadas por asociaciones constituidas al efecto por los beneficiarios».