Zapatero anuncia la mejora de los datos de empleo a partir de marzo

El mano a mano parlamentario entre José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy se ha centrado esta mañana en los datos del desempleo y ha carecido de toda intensidad. El líder de la oposición ha destacado que febrero, una vez más, coloca el paro español en cifras récord que doblan las tasas medias de la Unión Europea. El presidente ha reconocido el mal dato del último mes, pero ha señalado que es mejor que el de los dos años anteriores y ha avanzado que "con toda seguridad" en marzo se verán "mejores cifras de desempleo", como preámbulo de la recuperación del empleo que comenzará "ya este año" fruto de las reformas económicas puesta en marcha en los últimos meses.

Rajoy ha lamentado que sea imposible creer los vaticinios de Zapatero, porque "la realidad siempre desmiente sus palabras" debido a que sus medidas no funcionan. Ha concluido que "así no se puede seguir", porque "es difícil que haya seguridad, confianza, certidumbre o inversión" y le ha recomendado que ya que no tiene ideas "vote a favor de un amplio paquete de medidas que el PP presentará para la recuperación económica".

Los duelos parlamentarios han quedado muy devaluados por la ausencia por enfermedad del vicepresidente primero, Alfredo Pérez Rubalcaba, que ha hecho desaparecer del hemiciclo el escándalo del chivatazo a ETA. Los dardos del PP se han dirigido como sustituto contra el vicepresidente tercero, Manuel Chaves, al que han colocado como máximo responsable político junto al presidente andaluz, José Antonio Griñán, del fraude detectado en las prejubilaciones de varios ERE subvencionados con dinero público. Hasta cuatro diputados del PP le han pedido su dimisión inmediata por este escándalo. Cháves ha dicho que las acusaciones sólo son "difamaciones, cininismo e hipocresía" y ha respondido que el partido que presenta como candidato al imputado Francisco Camps no está en condiciones de "darle lecciones a nadie".