«La independencia de la mujer solo puede llegar si tiene un empleo y una nómina»

A la candidata del PP a la Alcaldía de Jerez y presidenta en la localidad de su formación nadie le coloca demasiado alto el listón más que ella misma. «Soy la más autoexigente, yo soy quien se marca los retos y me exprimo al máximo; no es que lo hagan mis compañeros por ninguna cuestión de género ni mucho menos», apunta María José García-Pelayo, a la sazón también vicepresidenta de la Cámara andaluza.

La popular hace hincapié en que de sus compañeros de partido solo ha recibido el máximo apoyo y mucha colaboración. Y eso que cuando ella empezó en esto de la política hacia el año 1992 «había pocas mujeres en este mundo y entonces ser concejal o diputada era un gran paso». García-Pelayo decidió darlo y ser una de las pocas mujeres en un mundo de hombres donde nunca sintió que «me miraran con lupa».

Ahora, unos cuantos años después, reconoce que se ha avanzado mucho respecto a la igualdad en el ámbito político, más allá incluso de cuestiones como las listas paritarias. «Si en la política no se consiguen romper barreras no sé cómo vamos a dar ejemplo a la sociedad. Es casi una obligación que tenemos», expone.

En su caso, nunca ha experimentado que eso que se ha denominado techo de cristal. «Creo que los he roto todos -bromea-. He sido presidenta del PP provincial, alcaldesa, vicepresidenta del Parlamento de Andalucía», afirma García-Pelayo, que insiste en que «a mi alrededor he sentido mucho respaldo y un equipo que no ha buscado hombres o mujeres, sino gente comprometida».

Pese a todo, la candidata popular reconoce que más allá de su ejemplo quedan retos para lograr la liberación femenina. Y en este punto es tajante al recalcar que «la única forma de que haya igualdad y una mujer sea libre para tomar sus decisiones es que tenga un empleo y una nómina que le den independencia».