El nuevo Gobierno de Irlanda mantendrá la política de ajuste

El nuevo Gobierno irlandés, formado por los dos partidos con más escaños en el Parlamento, Fine Gael y laborista, mantendrá en líneas generales la política de ajuste aplicada por su predecesor a la espera de una larga negociación con el FMI y la UE, que han prestado a Dublín 85.000 millones de euros para evitar la quiebra.

El Ejecutivo de Fianna Fáil cayó en el descrédito en los dos últimos años. A las crecientes historias sobre corrupción personal se añadía la debacle del tigre céltico y una sucesión de decisiones opacas o erróneas para evitar la quiebra de los bancos irlandeses y trasladar finalmente ese riesgo al Estado. El electorado castigó a Fianna Fáil en las elecciones del 25 de febrero (de 77 escaños pasó a 20) pero el programa presentado ayer por los dos vencedores se asemeja mucho a lo que los perdedores estaban aplicando y proponían en su programa.

Fine Gael quería reducir el déficit anual de los presupuestos del Estado a un 3% quizás en 2014 o 2015. El Partido Laborista prometía recortarlo al 3% «no más tarde de 2016». Fianna Fáil decía en su manifiesto que lo reduciría al 3% antes del final de 2014, como firmó el Gobierno con el FMI y la UE. El acuerdo de la coalición dice que lo recortará antes de que termine 2015.

Los dos partidos refrendaron en convenciones especiales ayer un acuerdo de coalición en el que ofrecen una reforma global del sistema político y marcan el terreno económico para ofrecer a las instituciones internacionales credibilidad.