Nueva Rumasa emplea a más de 400 trabajadores en la provincia

Las informaciones sobre la decisión de Nueva Rumasa de dar el paso previo al concurso de acreedores en diez de sus empresas fueron seguidas ayer viernes con especial atención por los empleados que tiene en la provincia el conglomerado de la familia Ruiz-Mateos, y que suman algo más de 400 personas, según detallaron ayer a este medio desde la Federación Agroalimentaria de CC OO en Cádiz, que al igual que la sección de este ramo de UGT está coordinada con sus secciones a nivel federal a la hora de gestionar toda esta situación.

Las dos centrales sindicales no paraban de atender ayer al teléfono y daban apoyo a los representantes de los trabajadores de las compañías de Nueva Rumasa de la provincia, que por la mañana mantuvieron un encuentro con la dirección en el que se les explicó lo que ya se había dado a conocer de forma oficial el día antes y que «no ha sido una gran sorpresa», como recalcó el secretario general de Agroalimentaria de CC OO, Luis Páez, que llegó a añadir que «incluso se esperaba algo así, porque ya había algunos problemas de impagos de los sueldos y se sabía que tendrían que dar algún paso».

Por eso ayer desde los comités de empresa reclamaron la explicación de en qué fase está toda la historia y, sobre todo, qué pasos quieren dar desde la dirección de Nueva Rumasa para traer de nuevo tranquilidad a los trabajadores de sus empresas, que ayer no podían dejar de mostrarse inquietos por su situación, sobre todo en la ciudad de Jerez.

Hay que recordar que es en esta localidad donde los Ruiz-Mateos cuentan con más trabajadores en la provincia, ya que una de las compañías afectadas por la decisión del preconcurso de acreedores es Grupo Garvey, que integra a tres bodegas de Jerez y una de Sanlúcar y es el emblema vitivinícola -con ramificaciones en otras regiones- del conglomerado empresarial.

Así, en el complejo Bellavista (más Vinícola Soto) trabajan alrededor de 170 personas, a las que hay que sumar otras 34 más de la antigua Sandeman, hoy Zoilo Ruiz-Mateos, y las 16 de Valdivia. A todas ellas se unen los 13 empleados que tiene Nueva Rumasa en la bodega Teresa Rivero de Sanlúcar (la antigua Caydsa), otros 96 de las viñas dependientes de la bodega Zoilo Ruiz-Mateos y unos 40 más de Viña San Patricio.

También otra de las empresas incluidas en el preconcurso, Dhul, cuenta con una delegación en la provincia, en la localidad de Chiclana, donde actualmente trabajan alrededor de una treintena de personas. Y desde los sindicatos también recordaban ayer a los 14 trabajadores de Royne en la ciudad de Jerez, porque aunque en su caso aún no se hayan tomado decisiones sobre la empresa de helados miran también con incertidumbre el futuro.

Para defender los intereses de estos trabajadores, y los del resto de España que suman un total de 10.000, desde CC OO y UGT ya han anunciado que su intención es personarse en el procedimiento especial de la Ley Concursal.