Vertidos y playas
Actualizado:Una de las competencias fundamentales de todo municipio de más de 50.000 habitantes es la protección del medio ambiente, conforme a la ley de Bases de Régimen Local. Esa tutela, si está bien gestionada redunda en beneficio del municipio, pues evita una percepción negativa de la ciudad y garantiza la salud de sus vecinos. Las imágenes de hace unos días de la boina negra que cubría el cielo de Madrid, que ha disparado las enfermedades respiratorias de sus ciudadanos, eran elocuentes.
En Cádiz, gracias a que apenas hay industrias contaminantes, salvo la fábrica de tabacos, y al mar que oxigena su término, como en muchas otras ciudades costeras, no se sufren grandes problemas ambientales por el aire que se respira. Por ello la atención medioambiental del Ayuntamiento se ha centrado en la limpieza de sus playas, como fuente de recursos de una población turística. Ese esfuerzo ha dado sus frutos, consiguiendo prestigiosas distinciones como las banderas azules de la Unión Europea, la blanca de AEONOR, la Q de calidad y el reconocimiento de cumplir con las normas ISO 14001. A pesar de ello, se han permitido las barbacoas del Carranza que han dejado su huella de degradación en la arena durante muchos días, en plena temporada turística. Pero esa excelencia en la pulcritud del pulmón de la ciudad puede peligrar tras reconocer el propio presidente de Aguas de Cádiz los vertidos de aguas fecales al mar sin tratamiento. El asunto se ha destapado tras la fuerte sanción impuesta al Ayuntamiento por la Delegación de Medio Ambiente de la Junta Andalucía ante las evacuaciones de esas aguas durante Noviembre y Diciembre por la red de pluviales en cinco puntos de la ciudad: La Paz, Mirandilla, Cortadura, Puntales y Lubet. De nada sirve tanto esfuerzo en las playas si cuando la gente se va a bañar se puede contaminar al contacto con el agua o mancharse mientras camina descalzo a consecuencia de que la inmundicia, por efecto de las corrientes, se ha depositado en la arena. El consistorio alega en su defensa averías y problemas de mantenimiento en su red de bombeo ¿A caso un barco cuando padece una avería puede contaminar sin ser sancionado? ¿Hay plan alternativo si estos percances ocurren en verano?