Medio Ambiente pone en marcha el llenado del embalse de Arcos
El Ayuntamiento arcense ha aprovechado el vaciado para hacer una limpieza general de la zona que siempre está inundada
ArcosActualizado:El embalse de Arcos está empezando ya a recuperar la normalidad desde que el pasado domingo volviera a recibir agua, un día antes de lo que tenía previsto la Agencia Andaluza del Agua. Así, antes de que finalice la semana presentará su aspecto habitual. Dicho pantano ha sido vaciado, y quedaron sólo dos de los 14 hectómetros cúbicos de agua que tiene embalsados, para llevar a cabo labores de limpieza y mantenimiento en sus compuertas.
Esta situación, que no se daba desde hace 20 años, ha provocado que el embalse se convierta en un gran atractivo para los vecinos de la localidad. Los arcenses se han tomado miles de foto en los espacios que normalmente están inundados por el agua e incluso se han reencontrado con un barco de palas, el Mississippi, que se encuentra encallado en el embalse y que fue el símbolo de su desarrollo turístico en la década de los 60.
Reapertura
La Consejería de Medio Ambiente abrió el domingo las compuertas del embalse de Bornos para darle agua a Arcos y en cuestión de horas ya comenzaba a notarse la subida del nivel del agua. Durante el tiempo que ha durado la situación, el Ayuntamiento arcense ha aprovechado para llevar a cabo labores de limpieza en las zonas que han quedado sin agua. En las mismas se han encontrado numerosos neumáticos, hierros e incluso un hidropedales, entre otras basuras.
El embalse de Arcos es de derivación y se encuentra situado aguas abajo del de Bornos, que procura la cota suficiente para proporcionar agua a un canal de riego. Por este motivo, su nivel permanece alto de forma constante y sus compuertas, inundadas. Para realizar las necesarias tareas de mantenimiento en estas compuertas hubo que dejarlas en seco, lo que obligó a bajar el nivel del agua mediante el vaciado parcial.
Esta maniobra ha permitido a Bornos recuperar el resguardo, es decir, pasará a almacenar la cantidad de agua adecuada a la actual época del año tras librarse del excedente.