La Junta no admitirá «ni una presión más» de Moresco con el PGOU
El Puerto Actualizado: GuardarEl alcalde, Enrique Moresco, ya no tendrá que llevar a pleno las alegaciones del nuevo Plan General de Ordenación Urbana sin el informe de medio ambiente de la Junta de Andalucía. Una acción que había anunciado en el caso de que no remitieran de forma urgente su dictamen. La delegada provincial del ramo, Silvia López, anunció que éste será enviado el catorce de febrero y advirtió que no admitirá «ninguna presión más» por parte del regidor portuense.
Moresco, que hace cuatro años citó entre sus promesas electorales la aprobación del nuevo PGOU, se había acogido a una prerrogativa legal para agilizar los trámites y que el documento de aprobación provisional tercera, con las alegaciones, fuera votado por el pleno entre el 15 de febrero y el 15 de marzo, sin la necesidad de contar con el informe favorable de Medio Ambiente, que tendría que haber llegado al ayuntamiento como máximo el dos de noviembre. Ante las continuas reclamaciones el organismo autonómico siempre ha argumentado que los técnicos estaban analizando el prolijo documento y las más de setecientas alegaciones presentadas. Algo que nunca convenció al regidor popular. «El Puerto no puede seguir paralizado por que la delegación de Medio Ambiente no dé respuesta alguna».
Moresco se acogió a que el planeamiento ya había sido adaptado al estudio previo de impacto ambiental y manifestó sus intenciones por carta a Silvia López, cuya reacción ha sido inmediata. «No admitiremos ni una presión más por parte del alcalde. O es que quizás no le interesa que se contemplen todos los condicionantes ambientales».
Diez años de redacción
La socialista anunció que el informe estará en el consistorio portuense el próximo día catorce y aseguró que la Junta no ha cometido ningún retraso indebido en su trabajo, sino que el ayuntamiento tardó casi un año en enviar la documentación necesaria. Desde diciembre de 2009, cuando se presentó la aprobación provisional segunda, hasta septiembre de 2010, cuando fue remitida a la Junta. Del mismo modo apuntó al proceso de más de diez años que acumula el nuevo planeamiento de la ciudad. «El único responsable es el ayuntamiento, que ha cambiado tantas veces el proyecto que cualquier parecido con el documento inicial es casualidad».