Ineludible sucesión
Temor socialista a que las autonómicas se conviertan en un plebiscito sobre Zapatero
Actualizado:Las elecciones autonómicas y municipales de mayo se ciernen sombrías sobre un PSOE que teme una debacle histórica. Si el partido gubernamental de turno ha tenido siempre dificultades en tales consultas locales -en 1999, el PP apenas logró empatar con un PSOE moribundo y en 2007, con la menor tasa de paro en décadas, el PSOE las perdió-, es de suponer que la crisis agravará este sino adverso. Y no parece que la convención autonómica que los socialistas han celebrado este fin de semana en Zaragoza haya reducido el riesgo, toda vez que la cuestión sucesoria, el momento en que Zapatero deberá hacer pública su marcha ya inexorable, ha eclipsado todas las conclusiones del encuentro. El error de llevar al debate político tan prematuramente el liderazgo socialista para reparar el desgaste insuperable padecido por el presidente del Gobierno oscurece las expectativas de los barones del PSOE, que temen que las autonómicas se conviertan en un plebiscito sobre Zapatero. De ahí el forcejeo entre quienes exigen que el anuncio se haga antes de mayo y los estrategas que piensan que debe hacerse después. Y esta pugna ha terminado ocultando el contenido más sustancial de la convención, destinado a convertirse en materia electoral: frente a un PP que calificó de «inviable» el Estado de las Autonomías, el PSOE sostiene que el modelo «resolvió de forma admirable un contencioso histórico» que ha proporcionado a España «el mayor periodo de paz, prosperidad y cohesión». En consecuencia, el PSOE apoyará «la fortaleza del valor España» a través precisamente de las comunidades autónomas y de la cooperación entre ellas. «Una España autonómica y cooperativa es más músculo, menos burocracia, más rapidez en las decisiones y mayor previsibilidad para invertir y crear empleo». El presidente del Gobierno, fiel a su propia consigna de eludir la cuestión sucesoria, ha llamado a los suyos a trabajar esforzadamente en el programa de reformas durante este año «clave» de 2011, ha comparado el pacto social con los Pactos de la Moncloa y ha convocado a todos los partidos a sumarse al gran acuerdo nacional. No cabe duda de que este logro fortalece a la actual mayoría, pero es dudoso que tenga algún impacto sobre las consultas que se avecinan.