Rafael Mateos, Joaquín Bilbao, Antonio Millán y Gabriel Selma son algunos de los nuevos consejeros del Xerez Deportivo. :: JUAN CARLOS CORCHADO
Deportes

Nueva etapa en el consejo xerecista

Joaquín Bilbao se perfila como presidente y Rafael Mateos como vicepresidente de la entidad azulina

JEREZ. Actualizado: Guardar
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Arranca una nueva etapa en el consejo de administración de un Xerez Deportivo que ayer presentó y aprobó los nombres de los nuevos consejeros de la sociedad anónima deportiva. Todo apunta a que Joaquín Bilbao volverá a tirar del carro como presidente y que estará acompañado por Rafael Mateos como vicepresidente, pero de momento lo único seguro es que ambos son ya consejeros de la entidad azulina y que estarán acompañados por los dos representantes municipales (Antonio Millán y Gabriel Selma). El organigrama lo completan tres empresas vinculadas a un Joaquín Morales (Luz Costa Inmuebles SL., ELTEAN Montajes Eléctricos SL. y Moralfinsa SL.) que volverá a tener mucho que decir dentro de la sociedad xerecista.

El próximo paso para que se aclare el consejo del Xerez se producirá cuando los siete integrantes del nuevo consejo se reúnan parar repartir los cargos. Algo que, en principio, estaba previsto para las «próximas 48 horas» -según Javier Tebas-, pero que parece que finalmente no tendrá lugar hasta la próxima semana. Lo que sí es más que evidente es que ayer arrancó una nueva etapa en el club y que los nuevos mandatarios tienen la intención de recuperar las riendas de una sociedad anónima deportiva que en estos momentos dirigen los administradores concursales. Joaquín Bilbao considera que la jueza intervino el Xerez Deportivo porque el clan argentino (Federico Souza, Martín Mattos y compañía) no cumplían sus funciones y abandonaron la entidad, pero espera que la situación cambie ahora que existe un nuevo consejo dispuesto a tomar el mando de la sociedad: «Entiendo que la jueza intervino por una serie de circunstancias y cuando esta situación desaparezca, que va a desaparecer, yo creo que volverá la normalidad y nosotros tendremos nuestras funciones, los administradores las suyas y cada uno se dedicará a lo que le corresponde. Por tanto, entiendo que el consejo de administración volverá a tener toda la gestión menos la administración».

Recuperar el mando del Xerez parece el objetivo a corto plazo, pero Joaquín Bilbao y Mateos miran más allá y se marcan una meta a medio plazo: lograr que el Deportivo esté en manos de jerezanos. Para ello tratarán de aprovechar el presunto interés de Morales en vender su paquete accionarial. «Joaquín Morales siempre nos ha manifestado que se puede producir una venta de sus acciones», apuntó un Bilbao que asegura que no tiene prisa. «Vamos a empezar paso a paso, por ejemplo el señor Morales se va a reunir con el Ayuntamiento para el asunto de las acciones municipales. El problema es que también está por medio Federico Souza y hay que ver los términos en los que se van a devolver, entre comillas, esas acciones. Pero su voluntad es llegar a un acuerdo».

Si efectivamente se soluciona este asunto, y el paquete accionarial municipal vuelve a manos de jerezanos, se recuperaría más del 20% de los títulos. Es decir, se daría un primer paso para jerezanizar la cúpula del Xerez. Y es que no habría que descartar que en el futuro Joaquín Bilbao y Rafael Mateos encabezaran un grupo de jerezanos que se hiciera con el resto de acciones de Morales. De hecho, Bilbao fue muy claro en este sentido: «Creo que la intención de Morales es desprenderse del club a corto o medio plazo y la idea que tenemos nosotros es que el Xerez debe terminar en manos de los jerezanos. Por eso debemos colaborar para que eso sea así, lo vamos a intentar y Morales está por la labor. Además, yo quiero y deseo que este consejo sea de transición. Me explico. Espero que haya más gente, que sean de Jerez y quiero encontrarme a algunas de las personas que están aquí dentro del consejo. Ellos saben a quienes me refiero». En concreto, Joaquín Bilbao estaba apuntando a la figura del presidente de la Federación de Peñas del Xerez, ya que han sido varios los ofrecimientos a Juan Carlos Corchado para que entre en un consejo de administración que, de momento, el peñista prefiere ver desde fuera.

Faltan consejeros

Bilbao sí que tuvo bastante claro desde un principio que quería volver a los despachos del Deportivo y no dudó en explicar los motivos que le han llevado de nuevo a la entidad azulina: «Entiendo que el Xerez se encuentra en una situación en la que no debe pasar demasiado tiempo ya que no tiene consejo de administración y sin un presidente. Entiendo que es un caso atípico y que no existe una representatividad. Además, creo que hay una serie de asuntos pendientes que tienen que funcionar mediante un consejo de administración. Por ejemplo, hay una serie de actas pendientes que se han quedado totalmente paralizadas».

Pese a las buenas intenciones del que fuera presidente y las importantes gestiones realizadas durante su anterior etapa, no todo el xerecismo entiende el regreso de Bilbao al consejo. «Habrá gente que de entrada no van a entender mi vuelta», reconoce el abogado jerezano, «pero lo cierto es que la configuración de este consejo no ha sido nada fácil. Creo que en el consejo de administración todavía no están los que tienen que estar, pero creo que con el tiempo entrarán la Agrupación, la Federación y la Fundación del Xerez ya que creo que en su momento deben estar dentro de este consejo de administración. Creo que ahora se da un paso, Joaquín Morales nos lo ha pedido y si finalmente soy el presidente explicaré los compromisos formales que se han adquirido. Nuestra idea es que el Xerez Club Deportivo a la larga pase a manos de los jerezanos y xerecistas».

Mateos votó contra Morales

Por su parte, Rafael Mateos no se mostró tan cercano a las posturas de Joaquín Morales. De hecho, durante la junta general un accionista minoritario propuso declarar al nazareno persona 'non grata' en el Xerez. Propuesta que Mateos no dudó en apoyar y que posteriormente explicó: «Joaquín Morales ha estado en algunos momentos bien, en otros mal y yo me he decidido por mí mismo. El consejo no está roto, simplemente Joaquín Morales tiene sus representantes, yo soy otro consejero y nada más. Él tiene una idea y yo otra». Además, Mateos añadió sus argumentos para continuar en el consejo: «Por mí parte, solo puedo decir que fui de los que puso mucho dinero en su momento y afortunadamente salvamos al Xerez. Ahora quiero seguir aquí. ¿Por qué? Mis acciones estaban en algo más del 9% pero con la ampliación de capital ya voy por un poco más del 6% y creo que me merezco estar en este consejo por el bien del Xerez y por el mío. Defiendo el club, pero también he visto que mi dinero se ha depreciado y como mínimo me gustaría que se quedara como está».

Tanto Mateos como Bilbao son hombres conocidos en la ciudad y no hace falta mucho tiempo para saber cómo trabajarán. Pese a ello solicitan un margen de tiempo antes de que se les juzgue: «Nos merecemos que nos dejen un plazo para que se vea que vamos a trabajar. No pido cien días, pero al menos que no me digan de entrada 'no'. Me parece que no es justo. Me merezco el beneficio de la duda. Ahora estoy hablando como consejero, ya hablaré como presidente», afirmó un Joaquín Bilbao al que le traicionó el subconsciente pues dio por hecho que ocupará el sillón presidencial cuando todavía no se ha reunido el nuevo consejo de administración.