El 'basket' imita al tenis y la Copa depara dos derbis
Los favoritos Barcelona y Real Madrid sólo se verían las caras en una hipotética final tras beneficiarse de un sorteo condicionado Barça-Joventut y Caja Laboral-Bizkaia Bilbao se enfrentarán en cuartos
MADRID.Actualizado:Los clubes de la ACB decidieron en verano imitar al tenis, para evitar que los dos primeros cabezas de serie de la Copa del Rey se puedan enfrentar antes de una hipotética final, y Barça y Madrid ejercerán de Rafa Nadal y Roger Federer en el torneo más atractivo y apasionante de la temporada, que este año se disputará en la capital entre el 10 y el 13 de febrero. El sorteo tan dirigido celebrado ayer, hasta el punto de que Regal Barcelona y Real Madrid no se encontrarían hasta el partido definitivo, deparó dos derbis en cuartos de final. Un duelo catalán entre el Barça y el DKV Joventut, y otro vasco, con el Caja Laboral y el Bizkaia Bilbao Basket como protagonistas. Los otros enfrentamientos de primera ronda serán Real Madrid-Gran Canaria 2014 y Blancos de Rueda Valladolid-Power Electronics Valencia, por la misma parte del cuadro de la 75ª edición.
A priori, vía libre para que los defensores del título y los anfitriones, que en la Copa no lo son tanto, porque el Madrid tendrá muchos enemigos en el Palacio de los Deportes, repitan la final de la pasada edición de Bilbao, aunque, como advirtió tras el sorteo Ricky Rubio, «igual Barça y Madrid no se ven en esta Copa». La estrella azulgrana, que se estrenará contra el equipo de su vida, no está convencido de la final más deseada, pero aplaude la novedad del sorteo condicionado que obliga a que el primer y el segundo clasificado de la Liga ACB no se encuentren hasta el último choque copero. «Todo va evolucionando. Realizar el sorteo como en el tenis es una buena idea. Es otro premio más que dan a la liga regular», apuntó el base catalán.
«Es justo que haya dos primeros cabezas de serie que no se encuentren hasta la final, como ocurre en el tenis», coincidió el madridista Carlos Suárez. «Si hubiese sido yo primero o segundo al final contestaría de otra manera, pero al final da igual, porque todo está muy abierto e igualado», añadió el héroe de la última Liga, el escolta del Caja Laboral Fernando San Emeterio, que opina que «en Bilbao se puedan quejar por el resultado del sorteo, porque quizás hubiesen preferido al Blancos de Rueda, pero nunca se sabe, ya que a un partido puede pasar cualquier cosa y el Bizkaia será un rival difícil, porque ha encontrado la línea después de un comienzo dubitativo».
«Favor» y puntilla a Aíto
En caso de superar la primera eliminatoria, el Barça se medirá en semifinales el sábado día 12 al vencedor del derbi vasco, y el Madrid, si cumple los pronósticos y se impone a un Gran Canaria que siempre ha caído en cuartos de final, al vencedor del choque entre el sorprendente Valladolid y el Valencia, dos equipos en racha de la mano de Porfirio Fisac y Svetislav Pesic. «En general el sorteo es muy bueno para nosotros, pero cualquiera puede dar una sorpresa. El Gran Canaria defiende muy bien y aquí, con aficiones de otros equipos, no se juega como en casa», advierte Carlos Suárez. Respecto al primer rival, que curiosamente jugará la Copa por una canasta de Sergio Llull al Fuenlabrada en el último segundo, el alero madridista sentenció: «Nos deben una». «El Gran Canaria se metió gracias al Madrid y le debe un favor», apuntó también Víctor Claver, para quien «el Barça se merece el reconocimiento de favorito», aunque el ala-pívot del Valencia recuerda que «el líder no está haciendo un juego como el del año pasado» y augura «una Copa bastante igualada».
Mientras el Blancos de Rueda se ha clasificado después de 12 ediciones sin Copa, y lo ha conseguido además como cabeza de serie -cuarto en la Liga- gracias a sus 11 victorias en 17 partidos y a un baloncesto alegre y espectacular que asombra, el gran ausente será, por segundo año consecutivo, el Unicaja. El Gran Canaria dio el domingo la puntilla a Aíto García Reneses y el técnico madrileño fue destituido ayer por el club malagueño, que ha jugado dos finales de Copa, y ganado una, en los últimos cuatro años, pero se ha quedado fuera del grupo que vivirá «96 horas de alta tensión», según el lema de la ACB. También serán privilegiados los aficionados que quieran acudir al Palacio, porque los abonos de 125 euros ya se han agotado y solo quedan disponibles los de 220 y 400 euros.