Berlusconi se dirige a los italianos en un video y niega el escándalo

Silvio Berlusconi pasó ayer a la defensiva con un mensaje a la nación grabado en su despacho, con las fotos familiares detrás. Así rechazó las acusaciones del último escándalo: prostitución de menores por sus relaciones con la marroquí 'Ruby' cuando tenía 17 años y concusión -extorsión por parte de un funcionario público- por llamar a una comisaría para que fuera puesta en libertad tras ser arrestada por robo. Negó todo y añadió una baza curiosa: reveló que tiene novia desde que se separó, lo que según él haría imposible el cuadro acusatorio. «Es absurdo pensar que haya pagado por tener relaciones con una mujer, no me ha pasado ni una sola vez en mi vida. Lo consideraría degradante para mi dignidad», repitió.

El mandatario lanzó un ataque a los fiscales de Milán, ante quienes está llamado a declarar el viernes: «No es un país libre aquel en que algunos magistrados conducen batallas políticas contra quien tiene cargos públicos». Deploró los registros «a las siete de la mañana» y «el inaceptable fichaje» de sus invitados, pinchándoles el teléfono. Sobre las grabaciones, que aún no se conocen, relativizó por anticipado su contenido porque, argumentó, hablando al teléfono a veces se habla en broma, exagerando o de forma superficial.

Sobre las dos acusaciones contra él, replicó que el dirigente policial que habría sido objeto de sus presiones lo rechaza y 'Ruby', a quien no nombró, «niega haber tenido nunca propuestas y mucho menos relaciones sexuales». Añadió que ella siempre dijo tener 24 años.