El ministro de Exteriores ruso dice que Madrid no ha explicado a Moscú la razón de la expulsión de dos de sus diplomáticos
Pese a ello no cree que el incidente afecte negativamente a las relaciones bilaterales
CORRESPONSAL EN MOSCÚActualizado:El ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, ha afirmado durante la rueda prensa que anualmente ofrece a todos los corresponsales extranjeros acreditados en Moscú que no ve “ninguna razón por la que estas salidas –expulsiones- pudieran influir negativamente en la línea general acordada para nuestras relaciones”.
Lavrov, no obstante, ha asegurado que el incidente no lo inició la parte rusa y ha manifestado que “a nuestros diplomáticos les instaron a abandonar España, debo decir honestamente, sin ninguna explicación sobre el porqué”. En tal situación, ha añadido el ministro ruso, “nosotros también tuvimos que invitar a dos diplomáticos españoles a salir de Rusia para garantizar la paridad en ese proceso, no por que seamos así de malos, sino sencillamente debido a que es el procedimiento que se aplica normalmente en tales situaciones”.
Al mismo tiempo, el jefe de la Diplomacia rusa ha subrayado que “esperamos con entusiasmo la celebración del año de España en Rusia y de Rusia en España y contamos con que su Majestad el Rey Don Juan Carlos pueda asistir a uno de estos eventos”. Ha expresado además el deseo de que “los contactos a nivel de Gobierno continúen desarrollándose activamente”. Lavrov ha hecho referencia a la visita que su homóloga española, Trinidad Jiménez, efectuará a Moscú a partir de mañana sábado.
A finales del pasado mes de noviembre, el Gobierno español expulsó a dos diplomáticos rusos por “desarrollar actividades incompatibles con su estatus”, fórmula que se emplea por lo general cuando se trata de asuntos de espionaje. Moscú respondió con la misma medida, aunque los afectados, el consejero político de la Embajada española en Rusia, Ignacio Cartagena, y el responsable de asuntos administrativos, Borja Cortés-Bretón, nada tenían que ver con actividades de espionaje y tenían un rango superior al de los dos diplomáticos rusos expulsados.
El Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación español dio entonces la crisis por “superada”, la más grave desde que los dos países restablecieran relaciones diplomáticas en 1977, tras 38 años de paréntesis. Jiménez será recibida por Lavrov este fin de semana, pero no habrá rueda de prensa conjunta como suele ser habitual.
La ministra mantendrá el domingo un encuentro con la prensa en la residencia del embajador, pero no está previsto que haga ninguna declaración oficial. Con ese fin, comparecerá el lunes ante los medios en compañía del viceprimer ministro ruso, Alexánder Zhúkov, pero para hablar, no probablemente de espionaje, sino de las actividades organizadas en el marco del año dual 2011. El programa incluye toda una serie de actividades de promoción mutua en diversas áreas (económica, cultural, científica, educativa...).