El PIB alemán crece un 3,6%, el mayor incremento en 20 años
La fortaleza de las exportaciones y el notable repunte de la demanda interna son los principales responsables del fuerte crecimiento
BERLÍN Actualizado: GuardarEl Producto Interior Bruto (PIB) de Alemania creció en el conjunto de 2010 un 3,6 % en términos interanuales, su mayor incremento desde la reunificación del país en 1991, ha informado hoy la Oficina Federal de Estadísticas (DESTATIS). El déficit público se situó el año pasado en los 88.570 millones de euros, o el equivalente al 3,5% del PIB, con lo que supera el límite del 3% fijado por el Pacto de Estabilidad y Crecimiento de la UE.
Pese al avance del PIB en 2010, los cálculos oficiales prevén que la economía alemana no recuperará hasta finales de este año los niveles a los que se encontraba antes de la crisis. Aunque el gobierno Federal mantiene sus previsiones de crecimiento para 2011 en el 1,8%, varios centros de estudios económicos e instituciones bancarias lo han situado ya entre el 2,2 y el 2,5%.
La fortaleza de las exportaciones y el notable repunte de la demanda interna son los principales responsables del fuerte crecimiento de la mayor economía europea, que lidera los avances de las naciones industrializadas tras la crisis y dobla el crecimiento medio de la Unión Europea. "Este ha sido el mayor incremento del PIB desde la reunificación. Los datos muestran que la gente puede con razón mirar al futuro con optimismo", ha asegurado en un comunicado el ministro de Economía, Rainer Brüderle. El titular alemán de Economía ha resaltado además que este fuerte crecimiento del país ha conllevado un fuerte incremento de la ocupación laboral, que alcanzó el año pasado un máximo histórico. "Nuestro país se encamina hacia el pleno empleo", ha apostillado Brüderle.
Desdeña la críticas internacionales
El Ministerio de Economía considera asimismo que con el descenso del desempleo y el aumento de los salarios se están sentando las bases para una demanda interna robusta que cimente un crecimiento económico sano a largo plazo y desdeña la críticas internacionales sobre la potenciación germana del sector exterior a costa de la recuperación de otros países. En concreto, el año pasado las exportaciones germanas aumentaron un 14,2% en términos interanuales, y las importaciones se incrementaron en un 13%, con lo que el sector exterior aportó 1,1 puntos porcentuales al PIB.
Pese al avance del PIB, los cálculos oficiales prevén que la economía alemana no recuperará hasta finales de este año los niveles a los que se encontraba antes de la crisis financiera global. Tanto el Gobierno federal como los principales centros de estudios económicos ya habían pronosticado que Alemania iba a crecer en 2010 entre un 3,5 y el 3,7%, un salto considerable frente al retroceso del 4,7% de 2009.
El presidente de DESTATIS, Roderich Egeler, destacó que la economía alemana "se ha recuperado notablemente bien y rápido de los efectos de la crisis económica", al alcanzar en los 2,498 billones de euros. El sector exterior volvió a ser en 2010 "uno de los más importantes motores del crecimiento" de la primera economía europea, según DESTATIS, como había sido habitual en Alemania -el segundo mayor exportador del mundo tras China- hasta la irrupción de la crisis global.