La ilusión llega a 139 niños de familias necesitadas jerezanas

«Hoy es nuestro día grande», como bien dice el tesorero y voluntario, Manuel Sarmiento. Y grande ha sido, pero para los más pequeños de la casa, que han disfrutado como solo lo hacen aquéllos que se han portado tan bien que hasta los mismísimos Reyes van a visitar.

Y es que este año la Asociación Soje lo ha vuelto ha hacer. Ha vuelto a repartir ilusión en forma de colores, de patinetes, de cascos, de cocinitas pequeñas de color rosa y hasta de camiones amarillos llenos de muñecos un tanto redonditos. Lo hace por décimo quinto año consecutivo, con diez voluntarios al frente, y con el único fin de ayudar a familias con pocos recursos de Jerez.

«Mira», dice Yumara de 5 años muy sonriente, mientras enseña como puede su regalo. Es una caja registradora con todo tipo de accesorios variados. A Fernando de 9 años los Reyes le han traído una diana y un futbolín «muy chulo».

Para Jonathan éste es su segundo año, pero no por eso le hace menos ilusión. Su padre lleva ya tres años en paro y eso los Reyes lo saben de sobra. Es precisamente por eso que le han traído un patinete, «una ayuda que agradecemos y sobre todo en estos días».

De eso se trata, de ayudar, de colaborar y de compartir. Por eso mismo esta sociedad anónima lleva más de 20 años realizando campañas de alimentos y aportando su granito de arena a la sociedad. Creando vínculos estrechos con estas personas, llegando a conocer su pasado, formando parte de su presente y participando en sus futuros proyectos.

Familias que por diversas circunstancias en estos días no hablan de la posible cuesta de enero o de los muchos y tan caros regalos que podrían regalar. Y que gracias a aportaciones como esta hoy han visto a sus hijos sonreír.

Un proyecto realizado con mucho cariño, dedicación y unos 1.500 euros. Importe que ha sido suficientes para que los 139 niños, de entre uno y once años, hayan podido participar y disfrutar de una mañana llena de globos, caramelos y regalos. Muchos regalos. Una cita a la que por supuesto no podían faltar los Reyes Magos, que recién llegados de Oriente repartieron felicidad a las más de 70 familias que se acogen estos días a la solidaridad de los voluntarios. Unos voluntarios que volverán el año que viene regalando más ilusión si cabe.