Los trabajadores municipales cobran la nómina de noviembre

Los trabajadores municipales del Ayuntamiento de Barbate han cobrado ya la nómina atrasada de noviembre y también la paga extra, según confirmó a Europa Press el alcalde del municipio, el socialista Rafael Quirós.

Quirós explicó que ya está manos a la obra buscando el dinero para pagar las nóminas siguientes, porque «es el tema de nunca acabar». Señaló que el Ayuntamiento «ha encontrado ya gran parte del dinero para pagar la nómina de diciembre», pero también hay que buscar para los meses sucesivos.

Se trata, además, de una cuestión que se está viendo «dificultada por el famoso decreto que entraba en vigor el 31 de diciembre» y que conlleva que los bancos «no dan ningún tipo de operación a los ayuntamientos, a los que no permiten ningún tipo de endeudamiento». Esto es, en su opinión, «un añadido más a la problemática» que ya tiene la mayor parte de los consistorios.

El alcalde barbateño apuntó que, aunque el suyo no es el único ayuntamiento con estas dificultades, sí parte de la base de que cuando llegó a la Alcaldía hace tres años encontró «un Ayuntamiento totalmente en quiebra y en ruina».

Desde entonces, «hemos hecho lo que podíamos hacer», adoptando decisiones que, por ejemplo, han implicado «aligerar la plantilla en la medida de lo posible y sin medidas traumáticas» porque, según reconoce, «no está la cosa para hacer un ERE o un ERTE».

Así, aunque considera que las medidas aún son «insuficientes» para hacer frente a la situación actual, la plantilla cuenta con casi 80 personas menos que hace tres años, eso sí, mediante jubilaciones, amortizaciones de puestos de trabajo o finalizaciones de contrato, entre otras medidas «no traumáticas».

Las causas

A principios de 2010, el alcalde reconocía sin tapujos que su ayuntamiento «está en quiebra» y hacía juegos malabares cada mes para poder pagar la nómina de los funcionarios. Una auditoría contable arrojó en 2007 que la deuda global del consistorio ascendía a 70 millones de euros, de los que 30 correspondían al impago de cuotas a la Seguridad Social y 11 millones a los bancos. El resto, a proveedores.

Quirós aclaraba que la situación económica es la herencia que dejó el anterior gobierno municipal, en manos del PP. La consecuencia inmediata de la morosidad a la Seguridad Social fue el embargo por parte del Ministerio de Economía de los 3,9 millones de euros que tenía asignados el ayuntamiento barbateño en el Plan E de 2009. El delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón, reconocía que ese dinero no llegará al municipio y se estudia ahora si podrá percibir los 2,4 millones correspondientes al Plan E de 2010.

Por ahora, los trabajadores ya han tenido un pequeño respiro de cara a las fechas navideñas.