El Staples abuchea a los Lakers y Phil Jackson carga contra sus jugadores

Los Lakers no levantan cabeza. Los vigentes campeones de la NBA se ganaron los abucheos del Staples Center de Los Ángeles con una nueva derrota, y por paliza, ante los Grizzlies (85-104), para agravar su crisis de juego y resultados y provocar la indignación de su técnico. Phil Jackson, que se retirará al final de la temporada, cargó contra sus jugadores tras sufrir su cuarta derrota en los últimos seis partidos, la tercera en cuatro encuentros en su cancha por 16 ó más puntos. «Nadie asumió la responsabilidad de jugar mejor que en Memphis, donde también perdimos. Con los días libres este equipo se descentra. Libraron el sábado, y ya he tomado nota sobre eso», advirtió el veterano entrenador que ha exprimido físicamente a Pau Gasol y ahora está pagando las consecuencias.

El ala-pívot español, fundido, frente a su hermano Marc sólo pudo aportar 10 puntos y ocho rebotes, perdió nada menos que cinco balones sin robar ninguno y no dio ni una asistencia. Bien defendido por Zach Randolph, Pau sólo lanzó nueve veces a canasta y acertó cinco en casi 32 minutos, mientras que Kobe Bryant, de nuevo muy individualista y con escaso acierto, realizó 22 lanzamientos de campo, con 1 de 7 en triples, para 28 puntos. El de Sant Boi volvió a ser el jugador de los Lakers que más tiempo estuvo en pista.

Negados

Solamente Kobe, Pau y el reserva

Shannon Brown (11 puntos) alcanzaron la decena en anotación, mientras que por parte de los Grizzlies, hasta cinco jugadores, cuatro de ellos titulares, lograron dobles dígitos en ataque. Memphis firmó 30 asistencias, y los angelinos sólo 13. Los máximos anotadores de los Grizzlies fueron Rudy Gay (27) y Randolph (21), mientras que Marc, a pesar de su gran defensa sobre Andrew Bynum, y también sobre Pau, se quedó limitado en ataque a cuatro puntos (2 de 10 canastas) en 38 minutos, aunque también puso cuatro tapones y dio seis asistencias. Sin duda, el pequeño del duelo Gasol fue un bastión importante en la defensa de Memphis.

Además, el pívot catalán de Memphis, sin embargo, destacó en la pintura bajo su aro, ya que de los 10 rebotes que cogió ocho fueron defensivos y robó tres balones, aunque perdió otros tres. Marc fue el mejor asistente del encuentro, igualado con su compañero Mike Conley, y el segundo máximo reboteador, con un rechace menos que Bynum. Pese a contar con Gasol, Bynum y Lamar Odom, los Lakers perdieron, entre otras muchas, la batalla por el rebote (37 frente a 44 de Memphis) y estuvieron desquiciados, con 20 pérdidas y un 33,3% de acierto exterior. Kobe Bryant, que lanzó más triples que todos los titulares de los Grizzlies juntos, estuvo negado desde fuera, y los Lakers fueron humillados.

Con tanta impotencia y superioridad de Memphis, incluso la gran estrella del equipo angelino golpeó una silla al dirigirse al banquillo de los defensores del anillo. Un gesto que denota la mala situación actual del vigente campeón. «No entiendo lo qué nos está pasando y por qué hemos perdido cuatro de los últimos seis partidos por 20 puntos de margen. Es algo que mi cabeza no logra procesar por ahora. Seguro que hay motivos», se limitó a comentar tras el desastre Pau Gasol, según declaraciones recogidas por 'Los Angeles Times'.