CUANTO ANTES, FICHAJES
Actualizado:Dicen que los gitanos no quieren buenos comienzos. Y entiendo como comienzo este principio de año en el que nos encontramos ahora. Es la mejor forma que se me ocurre para digerir la derrota de ayer en el Ramón de Carranza, una derrota a todas luces injusta por lo que se vio durante los 90 minutos en un partido en los que de amarillo gozaron de mayor posesión de balón y de mayores oportunidades que un rival que al final se llevó el gato al agua con un gol de penalti dudoso.
Vaya por delante que el Melilla me parece un buen equipo de medio campo hacia arriba, especialmente David Vázquez, Guille Roldán y Andrés Ramos. Pero aquí se les vio poco gracias al trabajo realizado por los nuestros. De hecho, salvo el penalti bien ejecutado por Vázquez y el tiro al palo en el minuto tres, poco más ofreció en ataque el equipo norteafricano y ayer dirigido desde el banquillo por García Tébar, tío del que fuera jugador del Cádiz Miguel García.
Lo malo es que ayer los nuestros tenían la pólvora mojada porque ocasiones tuvimos para aburrir lo que no tuvimos fue acierto. Todos los disparos fueron repelidos por la organizada defensa azulina, todos los cabezazos se fueron a las manos de Dorronsoro o salían desviados... Ayer no era el día. Estaba claro.
Con todo eso tengo una cosa clara (más clara todavía que lo tenía antes) y no es otra que este equipo necesita refuerzos como el comer, sobre todo en la línea de ataque. Si se quiere ascender este año a Segunda División la necesidad de jugadores que incrementen el nivel cualitativo de este equipo es obligatoria. ¿Qué teníamos en el banquillo ayer que mejorara lo que se tenía sobre el rectángulo de juego? Poca cosa, la verdad. Por eso los cambios no se hicieron antes. Por eso se hicieron dos de una tacada al final y para si sonoba la flauta. Que no sonó. Por eso a los Reyes Magos les pido para este Cádiz no un refuerzo sino dos en la parte de arriba y además con carácter de urgencia. Empezamos mal este 2011 con lo bien que iba. Porca miseria. Y punto.