La privatización de las 13 primeras torres de control estará lista en un año
AENA comenzará el concurso público en un mes para aeropuertos como el de Jerez, Ibiza, Sevilla, Valencia, Lanzarote y La Palma
JEREZ.Actualizado:El Gobierno ha activado ya el proceso de liberalización del control aéreo, cuya primera fase culminará dentro de un año con la entrada en servicio de personal de empresas privadas en las torres de 13 aeropuertos, entre los que se encuentra el de Jerez. La orden del Ministerio de Fomento, publicada ayer en el Boletín Oficial del Estado (BOE), concede a AENA un mes para iniciar el concurso público que habrá de culminar con la externalización de los servicios de control de torre en los aeródromos de Alicante, Ibiza, Valencia, Sabadell, Jerez , Sevilla, Lanzarote, Fuerteventura, La Palma, A Coruña, Vigo, Melilla y Cuatro Vientos.
Fomento asegura que esta reforma, la mayor de los últimos años en el ámbito aeroportuario, persigue mejorar la calidad del servicio y reducir costes. El responsable del departamento, José Blanco, señaló que el objetivo es lograr un abaratamiento del 15% en las tasas de navegación, que beneficiará, entre otros, al sector del turismo, pues tres de cada cuatro visitantes extranjeros llegan a través de aeropuertos. España, resaltó Blanco, tiene ahora los costes de navegación aérea más altos de la UE, y eso hace «insostenible» el actual modelo.
La elección de este listado de torres no es casual sino que el Ejecutivo escogió las torres a partir de un análisis de AENA sobre su complejidad, tipo de tráfico y volumen. En la selección influyó que ninguna de esas dependencias realiza control de aproximación, que no son bases aéreas abiertas al tráfico civil -en las que el control está en manos del Ministerio de Defensa- y que no han sido designadas para el servicio AFIS (sistema automatizado que no requiere personal de control del tránsito aéreo). El resto de torres serán externalizadas a partir de 2012, excepto las que estén bajo control militar o AFIS.
Un portavoz de Fomento recalcó que los 190 controladores que prestan servicios en los centros a liberalizar en esta primera fase «no perderán sus empleos». Las nuevas empresas adjudicatarias estarán obligadas a contratarles si aceptan sus condiciones, que probablemente incluirán una rebaja de sueldo. Si no están de acuerdo, AENA estará obligada a ofrecerles un puesto en centros de control bajo su responsabilidad. Aquellos que no acepten ninguna de las opciones tendrán derecho a la rescisión de sus contratos, con la indemnización que establezca la ley. Las mismas fuentes detallaron que hay ya seis empresas interesadas en el concurso: Ferroser (filial de Ferrovial), Clece (ACS), Tower ATS (Indra), Navsa (FCC), Saerco y Gesnair.
Licitación
El proceso de licitación se realizará en tres tandas y durará alrededor de siete meses: la primera afectará a los aeródromos de Alicante, Ibiza, Valencia y Sabadell; la segunda, a Sevilla, Jerez , Vigo, A Coruña, Melilla y Cuatro Vientos. En el tercer lote entrarán los restantes.
En una primera fase Fomento pondrá la información sobre el proceso a disposición de las empresas interesadas, que deberán acreditar su solvencia. Para ello deberán demostrar que tienen experiencia como proveedoras de servicios de tránsito aéreo, que disponen de personal de control con licencia en vigor y que cuentan con un seguro ante riesgos potenciales. El plazo para presentar la documentación será de ocho semanas.
En la segunda etapa los licitadores tendrán que presentar sus ofertas. Para ello será obligatorio que estén certificados como proveedores de servicios de control de tránsito aéreo con arreglo a la normativa europea de cielo único. El plazo será de diez semanas y entre ellas AENA seleccionará las que crea más adecuadas. Finalmente habrá otras diez semanas para negociar con los ofertantes y adjudicar la gestión de las torres. Después habrá un período de transición de tres o cuatro meses, hasta que la Agencia Estatal de Seguridad Aérea certifique a los nuevos proveedores.
Los servicios de control de torre ya están liberalizados totalmente en Reino Unido y Suecia, y de forma parcial en Dinamarca y Alemania. El ministerio insiste en que este es un proceso de externalización de servicios y no de privatización, pues la licitación estará abierta a empresas públicas de otros países que estén certificadas.