Los tres aeropuertos de Nueva York vuelven a operar tras la tormenta de nieve

Un día después de la tormenta de nieve que colapsó los sistemas de transporte en buena parte de los Estados Unidos, los aeropuertos internacionales JFK y La Guardia de Nueva York volvieron a abrir sus puertas ayer. Horas más tarde, la actividad se reanudó también en el Newark Liberty, según confirmó el portavoz de la Autoridad Aeroportuaria de Nueva York y Nueva Jersey, Steve Coleman.

A la reanudación del tráfico aéreo se sumaron además los aeródromos de Filadelfia y Boston. Según apuntó el portavoz de la Administración Federal de Aviación, Paul Takemoto, la normalización de las actividades en estos aeródromos contribuirá especialmente a descongestionar la zona noroeste del país, la más afectada por el fuerte temporal de frío y nieve.

El transporte ferroviario también volvió a operar ayer, a pesar de que han llegado a caer hasta cuatro metros de nieve en las vías cercanas a Nueva York. Asimismo, el servicio de metro de la línea norte ha quedado restablecido, después de que las fuertes rachas de viento de los últimos días derribaran varias torres eléctricas.

Circular por carretera, sin embargo, continuaba siendo un auténtico reto. La manta blanca que cubre la ciudad ha sepultado a cientos de coches, mientras que alrededor de 400 autobuses del servicio público han tenido que suspender sus rutas, según recogen los informes de las oficinas de tránsito.

«Ahora nuestra prioridad es buscar todo lo que ha quedado enterrado y hacer que mañana todo esté en su sitio para poder prestar el servicio», explicó el jefe de la Autoridad Metropolitana de Tránsito, Jay Walder, en una rueda de prensa celebrada en el ayuntamiento, según informó el diario 'The New York Times'.