El comercio chino, bajo la lupa de la competencia
La mayoría de los negocios visitados en la provincia no tiene horarios regulados ni hojas de reclamaciones para los clientes Una inspección revela notables irregularidades
CÁDIZ. Actualizado: GuardarEl milagro chino, que ha hecho de este país aún sujeto al sistema comunista una de las grandes potencias económicas del mundo, ha tenido en las exportaciones uno de sus ejes básicos de desarrollo. En pocos años, los mercados internacionales han sido inundados de productos 'made in China'. La principal ventaja son sus precios competitivos gracias a una mano de obra muy barata. Tras una primera fase de introducción de productos, se ha pasado a la comercialización a través de negocios controlados por ciudadanos asiáticos. La férrea competencia que están plantando al comercio autóctono está generando muchas protestas. Los últimos en pedir igualdad de condiciones para las tiendas de los chinos y los nacionales ha sido la Confederación Empresarial de Comercio de Andalucía (CECA).
La institución ha hecho un llamamiento a las administraciones para que lleven a cabo un mayor control y más efectivo del cumplimiento de la normativa por parte de unos negocios que proliferan a marcha forzadas desde los últimos años.
Un muestreo realizado por técnicos de la CECA en establecimientos de este tipo en Andalucía -han visitado 467 con una superficie de media superior a los cien metros cuadrados-, constata que la mayoría no tiene visible el horario de apertura y cierre, no dispone de hojas de reclamaciones y no cumple la normativa de seguridad e higiene porque en muchos casos mezclan los productos de alimentación con otros.
Abiertos de sol a sol
En la provincia de Cádiz, los inspectores visitaron 84 establecimientos (con una superficie media de 105 metros cuadrados), de los que el 87% no tenía visible el horario de apertura, aunque de media funcionan diez horas al día, y el 63% carecía de hojas de reclamaciones. Además, la CECA ha constatado que se venden productos falsificados. Por eso exige que estos establecimientos deben respetar la normativa de defensa de los consumidores y que sus trabajadores estén dados de alta en la Seguridad Social.
El adjunto al secretario general de la Confederación, Jesús Reina, aseguró que la inspección ha detectado «incumplimientos que no están controlados» en normativa laboral, de consumo y de salud laboral. También trataron de descubrir qué hay de cierto en esa leyenda urbana sobre las ventajas fiscales que los comercios asiáticos tienen. Sin embargo, este tema lo ha desmentido la Agencia Tributaria a la CECA.
El técnico de la confederación, ha alertado de la proliferación de estos bazares en los últimos cinco años, los cuales han avanzado en calidad y especialización, sobre todo en textil y hostelería. Según el análisis efectuado, el comercio regentado por asiáticos se ha sabido aprovechar de la crisis económica, que ha provocado el cierre de muchas tiendas tradicionales. Eso les ha llevado a emplazamientos estratégicos en las principales zonas comerciales de las ciudades, y también han ganado en tamaño de superficie. En Cádiz, esa progresión se observa en arterias como la Avenida o San Francisco.