Juan José, (a derecha en la foto), decidió hace unos días burlar la orden de permanecer en Marruecos. :: L. V.
Ciudadanos

El pescador huido de Marruecos reitera su «inocencia» desde su casa

Juan José Ramírez lleva varios días en Los Barrios, tras escapar del hotel de Tánger donde esperaba la ejecución de su condena por tráfico de hachís

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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Juan José Ramírez, uno de los dos pescadores, vecinos de Los Barrios, que permanecen desde el pasado mes de junio en Marruecos acusados, y condenados, por un presunto delito de tráfico de drogas, reiteró ayer su «inocencia» desde su domicilio en Los Barrios, a donde llegó hace unos días tras escaparse del hotel de Tánger donde permanecía recluido.

Junto a su compañero de pesca, Jorge Cano -que se ha quedado en Marruecos-, Juan José regresó a casa de 'incógnito', procurando no ser descubierto por la Policía marroquí y eludiendo la orden de permanecer en su retiro forzoso, tras haber sido condenados hace apenas unas semanas por un juez alauita a tres años de cárcel y a pagar una multa de 160.000 euros.

Ambos pescadores se defienden a capa y espada. Según explicaron ayer a LA VOZ fuentes cercanas a la familia del más joven de los apresados, «este caso no tiene ni pies ni cabeza». Los dos ciudadanos de Los Barrios fueron detenidos el pasado mes de junio cuando navegaban junto al hijo de uno de ellos por aguas de Marruecos; ambos fueron acusados de tráfico de drogas, después de que las autoridades marroquíes encontraran una moto acuática con varios fardos de hachís en las inmediaciones del lugar.

Sus respectivas familias luchan desde entonces por demostrar que son inocentes, y basan sus argumentos en que tanto Juan José como Jorge se adentraron en aguas jurisdiccionales del país vecino por culpa de la niebla y su falta de experiencia en la navegación.

Ambos pescadores han permanecido en las últimas semanas en un hotel de Tánger a la espera de que se hiciera efectiva la condena dictada contra ellos. Sus respectivos familiares siguen movilizándose, y además de solicitar la ayuda formal de las altas instancias españoles, han acudido incluso a la Casa Real o al Defensor del Pueblo.

Lo que ya no le quitará nadie a Ramírez, de 27 años, es haber podido volver a casa por Navidad. El pescador lleva desde el pasado jueves en su domicilio de Los Barrios. Llegó «en buen estado de salud» según su familia, que no quiso dar ayer más detalles de cómo realizó el polémico viaje de regreso.

Así, y aunque el joven no teme una posible extradición a Marruecos, según su propia madre permanece «atento» a cualquier novedad que pudiera producirse en su caso.

Los dos pescadores esperan que su situación se aclare, y que la aventura de su detención y procesamiento judicial en el país vecino no se prolongue ni un día más. El siguiente paso para su defensa será la presentación de un recurso ante el Tribunal Superior de Marruecos.