La acusación pedirá asesinato para el imputado por el crimen de Las Tablas
El abogado de la familia de la víctima no descarta que existiera ensañamiento y espera el dictamen forense para concretar el delito
JEREZ.Actualizado:El crimen sobrecogió a una barriada entera que aún no ha logrado sobreponerse de la tragedia que supuso la pérdida de una vida joven a manos presuntamente de un vecino de su comunidad. Adrián S. F, un chico de 24 años de edad de El Polila, en Las Tablas, fue detenido el pasado mes octubre acusado de matar a su amigo Francisco Caro Borrego por algo tan nimio como una trituradora de marihuana.
Al poco tiempo, el letrado Luis Espinosa, del bufete de abogados Cosano, fue contratado por la familia de la víctima para que ejerciera la acusación particular y enseguida se puso manos a la obra con el caso. Como explicó hace unos días a este medio, el despacho está esperando el informe forense del acusado, que incluye la realización de diversas pruebas psíquicas, para determinar la imputación concreta. No obstante, el abogado adelantó que en un principio su intención es decantarse por asesinato en lugar de homicidio, lo que implica penas de mayor envergadura.
En el primero de los casos, se tienen en cuenta agravantes como premeditación, alevosía y ensañamiento, que en este proceso podría estar argumentado el último de ellos en la cantidad de heridas que recibió el finado. La pena máxima por este delito podría superar incluso los 20 años de cárcel, mientras que el homicidio rondaría los 15. De cualquier modo y como insistió Espinosa, hasta que no se conozca el dictamen forense no determinará con exactitud el delito a imputar.
Las citadas pruebas han sido solicitadas por la abogada del joven e incluyen la detección de sustancias tóxicas en su organismo, que podría ser utilizado por la defensa como posible atenuante, en el supuesto de que se demostrara que Adrián S. F. se encontraba bajo los efectos de los estupefacientes en el momento de cometer el crimen. Asimismo, también podría contribuir a rebajar su condena el hecho de que el imputado se declaró culpable una vez que fue interrogado por el juez de guardia, e incluso en su propia casa cuando llegó la Policía para arrestarlo.
Francisco Caro Borrego, de 21 años de edad, encontró la muerte el pasado 15 de octubre en El Polila, a donde había acudido para discutir con su amigo por el precio de la trituradora antes mencionada. La pelea se recrudeció en casa de Adrián hasta tal punto que su padre intentó mediar en el conflicto, hecho que aprovechó el joven para presuntamente introducirse en la cocina y coger un cuchillo, con el que asestó varias puñaladas a la víctima.