Una década de 'Plata'

«Ni veteranía ni experiencia, esto es suerte». Juan Luis Redondo cumple su décima campaña en Segunda División, toda una década en la categoría de plata del fútbol español y lo hace sintiéndose «un privilegiado» de desempeñar «lo que más me gusta y tener el placer de estar tanto tiempo entre Primera y Segunda División. Han sido 14 años, casi nada, diez en Segunda y cuatro en Primera, y para un jugador es todo un orgullo». Los inicios para Juan Luis Fernández Redondo parecían llevar escrito el guion de un futbolista llamado a hacer cosas importantes en el fútbol: «El camino se allanaba cuando estaba en el filial del Betis. Me pasaron cosas muy bonitas, como el debut con el primer equipo o la convocatoria con las secciones inferiores de la selección española. Muchas cosas se juntaron». Sin embargo, no todo fue un camino de rosas para el defensa natural de Camas: «A lo mejor, lo típico, por no hacer las gestiones bien con el club, con el Betis, pues me tuve que buscar la vida fuera de casa. Pero me siento un privilegiado de esto, un afortunado y espero seguir la racha para que en vez de diez años pueda cumplir quince».

De Sevilla a Alicante, para firmar con apenas 20 años por el Hércules, uno de los equipos con el que más partidos ha disputado. Ahora, doce años después, Redondo tira de memoria para recordar todo lo acontecido, aunque es incapaz de destacar algo por encima de todas las cosas: «Hay muchas cosas, muchos recuerdos, pero te quedas con lo que vas dejando en el camino y eso al final se simplifica en las amistades. Para mí es muy bonito ir a Alicante y ver que tienes amistades que sobresalen del fútbol por encima de todas las cosas, en el Logroño, donde tengo amigos que son como mi familia, o aquí en Jerez, donde la gente me trata como un familiar más... Te quedas con las amistades que vas dejando».

Sevilla, Alicante, Logroño, Elche, Jerez... Sin lugar a dudas, el conjunto azulino fue el que permitió al camero volver a soñar con el fútbol. Aquí llegó sin contrato y con la ilusión de un canterano, ya que el club, con un paso del descenso a Segunda B, no tenía del todo claro contratar al sevillano: «Tengo esa suerte. El equipo estaba desahuciado, me la jugué a una sola carta y fíjate que he llegado incluso a jugar en Primera División con estos colores. Es una historia nueva en mi vida, pero seguramente la más bonita que he vivido».

¿Y ahora qué? Con la salida de Francis muchos no confiaban en que Redondo pudiera tomar las riendas de la banda derecha. Sin embargo, y tirando de casta y mucho trabajo, el sevillano es el amo y señor de la diestra de Chapín, mostrando un gran estado de forma: «Intento trabajar igual porque no creo en ese mito de que un jugador cuando llega a cierta edad no sirve para jugar al fútbol. Yo trabajo día a día como el que más, intento ponerle las cosas difíciles al entrenador y, sobre todo, disfruto al máximo de todo lo que estoy viviendo».

Ambicioso 2011

Con el 2011 a la vuelta de la esquina, y comenzando las vacaciones hasta el 27 de diciembre, Juan Luis Redondo mira el futuro inmediato con «optimismo» y deseos que espera cumplir: «Lo primero que quiero es un tópico, tener salud, tanto para mí como para toda mi familia. Después, trabajar y trabajar para poder tener suerte en lo deportivo, pero también que las lesiones me eviten». Sin embargo, el experimentado defensa tiene un propósito de año nuevo que no puede ocultar: «Esto ya es personal, pero como mínimo quiero que el equipo acabe entro los seis primeros clasificados para disputar la liguilla y jugar en Primera otra vez». Va a por todas y quiere cumplir su decimoquinto año como profesional de nuevo marcando a Cristiano Ronaldo.