Lo recaudado en Navidad supone el 40% de los beneficios de todo el año para el pequeño empresario. :: L. V.
Jerez

La huelga de autobuses será «la puntilla» para el comercio

Asunico y Acoje creen que la protesta resultará fatal para las ventas, aunque confían en que el problema se solucione a tiempo

JEREZ. Actualizado: Guardar
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Mientras hacen lo imposible por salir airosos ante la feroz competencia de los gigantes empresariales, un nuevo revés se cierne sobre el maltrecho comercio local. En esta ocasión poco tiene que ver de forma directa con el sector, pero mucho si se tiene en cuenta que de ello depende el acceso al centro de buena parte de la población.

La huelga de autobuses es el nuevo enemigo a batir y, aunque las dos principales asociaciones de comerciantes muestran su comprensión con los motivos que mueven la protesta de los conductores, lo cierto es que no pueden ocultar su angustia por las consecuencias que ello les reportará. Tanto Manuel García, presidente de Asunico, como Fernando García, al frente de Acoje, recordaron ayer que las ventas de Navidad suponen el 40% de lo que se recauda en todo el año, y de ahí la importancia de que nada perjudique la campaña.

«A nosotros nos va a afectar de lleno-confesó el primero de los citados anteriormente-. Si no vamos a tener transporte en plena campaña será un total desaguisado, una barbaridad, lo que nos faltaba». Un problema que también se presentará para la plaza de Abastos, cuyos comerciantes según Manuel García «no quieren ni pensar en este tema».

No obstante, el presidente de Asunico prefirió mostrarse optimista y confiar en que el conflicto que mantiene la empresa con el Ayuntamiento se solvente antes del temido 27 de diciembre, cuando está previsto que comience la huelga. «No entiendo que el Ayuntamiento no ponga medidas para solucionar algo que está en su mano, porque al final pagamos siempre los mismos. Los trabajadores tienen derecho a cobrar y nosotros queremos una solución definitiva».

Si las partes no llegan a un acuerdo, el empresario aseguró que él mismo intentará mediar y no se quedará de brazos cruzados. Fernando García, por su parte, se expresó en los mismos términos, vaticinando que la huelga «será la puntilla en un año muy malo para el comercio». De igual modo, expresó su confianza en un posible fin del problema y adelantó que trasladará su inquietud a la Mesa de Jerez Centro Comercial, para que se busquen soluciones lo antes posible.