La mejor despedida posible

Mejor despedida de año no pudo tener el Portuense ante sus incondicionales. La tarjeta de felicitación de Navidad que los jugadores de Paco Corbeto dejaron a sus aficionados consistió en vencer a un difícil rival con dos magníficos goles y una posición en puestos de play offs, cuando solo falta visitar el domingo al Algeciras para la conclusión de la primera vuelta.

Para que todo esto ocurriera, el Puerto Real fue un buen colaborador. Los visitantes fueron mejores que los locales en los primeros 45 minutos. Gozaron de dos claras ocasiones, mientras el Portuense no tiró a portería. Navarro pudo haberle dado la tarde a los locales si el puertorrealeño llega a acertar en dos ocasiones de las que gozó. La primera en jugada trenzada, donde se quedó sólo ante Edu Villegas y el jerezano le sacó en un uno contra uno un balón cuando ya se disponía a disparar por bajo. La segunda sería de la propia cosecha del mismo Navarro, que se sacó un disparo desde más de 30 metros, que de nuevo el cancerbero local en un escorzo hacía atrás sacó a córner. Ahí se le fue el encuentro al conjunto de Sergio Moguer.

Porque la segunda mitad, aunque llegó a comenzar casi de la misma manera que la primera, fue distinta. El primer gol del Portuense supuso un jarro de agua fria para los verdiblancos, que desaparecieron del terreno de juego, para cambiar las tornas del primer periodo. Fue el Portuense el que tiraría a portal contraria, mientras los visitantes no lo consiguieron.

Los dos goles locales fueron de bellísima factura y ambos un calco uno de otro con la diferencia que el primero de José Antonio fue de bolea por alto mientras el de Lolo Prado por bajo.

En los mismos, mientras los locales estuvieron acertados, no tanto así la defensa visitante que se mostró un tanto corta en los rechaces. Pero sin duda los dos mejores goles que se recuerdan de la primera vuelta en el Cuvillo.

Un tiempo para cada equipo pero con mayor eficacia local, que le valió incluso a los de Paco Corbeto en el triunfo más holgado de lo que llevan jugado. De los nueve triunfos cosechados, es el primero que se consigue por dos goles de diferencia.