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Peter Weir: «Me gusta ser considerado un director de orquesta»

El realizador australiano convierte a Ed Harris y Colin Farrel en unos prisioneros de los gulags soviticos en 'Camino a la libertad'

MADRID Actualizado: Guardar
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Peter Weir, en los últimos años, se ha tomado con calma hacer películas. En los noventa, rodó El show de Truman; en 2003, Master and commander; y a final de la década estrena el 5 de enero Camino a la libertad, una historia en donde el realizador australiano exprime a sus actores. "Me gusta ser considerado como un director de orquesta, aunque si no tengo buenos instrumentos, no sirve de nada", ha aseverado el realizador. Para esta nueva aventura, Weir enroló a Ed Harris, que ya trabajó con él como padre de Truman, Colin Farrel, Jim Sturgess (Across the universe) y Saoirse Ronan (The lovely bones).

La aventura de Camino a la libertad es una recopilacin de historias sobre los miles de personas que fueron desterrados a los gulags siberianos en la poca estalinista. El líder soviético mandó al fin del mundo a criminales, sospechosos disidentes, gitanos, chechenos, letones, estonios, entre otros, y a casi dos millones de polacos. Stalin decidió purgarlos cuando invadió el país junto a los nazis en los albores de la Segunda Guerra Mundial. Uno de estos polacos fue Slavomir Rawicz. Oficial de caballera, plasmó en La increíble caminata (1956) las peripecias de muchos de sus compatriotas que engrosaron las filas del ejército soviético o que huyeron hacia el sur, a India y Oriente Medio para combatir en las tropas británicas. La historia le sirvió a Peter Weir para volver al cine después de Master and commander. "Sabía poco de los gulags. Fue todo un descubrimiento porque siempre se ha hablado de las cosas terribles que hicieron los nazis, pero no de esto", ha comentado el realizador, candidato al Oscar en seis ocasiones.

En uno de estos campos de concentración, se encuentran un extraño americano llamado Smith (Ed Harris); Janusz (Jim Sturgess), un soldado polaco traicionado por su mujer y Valka (Colin Farrel), un criminal ruso con deudas de juego. Los tres huirán hacia la frontera mongola, al sur, para evitar la estepa siberiana y las tropas alemanas. Y en ese viaje se toparán con Irena (Saoirse Ronan), una joven polaca con un oscuro pasado. Esta historia fue también un hallazgo para todos los actores, que desconocían este lado de la Segunda Guerra Mundial. Pero quien más se sorprendi fue Harris. El actor es un americano que durante la gran depresión decide marcharse de Estados Unidos para trabajar en Rusia. "Al llegar allí les quitaban el pasaporte. Cuando comenzó la represión de Stalin, se vieron atrapados porque no podían salir del país. Les decían que no eran americanos. Muchos acabaron en los campos de concentración", ha explicado el actor.

Cine para adultos

Weir está convencido en seguir contando historias de personas normales que superan a sus circunstancias. "Es preocupante que el cine de superhéroes esté arrinconando al cine de adulto", ha comentado el australiano, alabado por todos sus actores. "Toda su concentración está en la película. Se fija en todo, en los botones, en el pelo en si llevas la misma suciedad... Todo lo que hace es para que tu trabajo sea mejor", ha indicado Harris. Por su papel en Camino a la libertad suena como candidato al Oscar. Pone la historia a un nivel altísimo. "Nunca me he sentido tan cómodo como actor que cuando he estado en sus manos", ha rematado Colin Farrel. El irlandés aprendió ruso en Los Ángeles con un entrenador y leyendo poesías de Pushkin. "Cuando hablaba el idioma sentía el dolor de esta gente", ha comentado.