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Los familiares esperaron noticias de la operación en Jerez. :: J. C. C.
Jerez

«Marcos ha vuelto a nacer»

El pequeño evoluciona favorablemente en la clínica de Boston donde fue intervenido del corazón este martes; Los médicos le han bajado ya la medicación y han empezado a alimentarlo

L. V.
JEREZ.Actualizado:

La familia Carribero Moreno no podía estar hoy más feliz. Las buenas noticias llegan sin parar del Children's Hospital de Boston, donde el pequeño Marcos fue intervenido quirúrgicamente este martes de su rara cardiopatía congénita con éxito. Tras las siete horas que duró la operación, el pequeño evoluciona favorablemente y sus padres y parientes están entusiasmados.

«Hoy le han colocado un tubo en el estómago para darle de comer, le han bajado la medicación y tiene la saturación de oxígeno en el 93% y sigue subiendo», explicaron sus familiares en Jerez después de contactar con Boston. «Los médicos les han dicho que si continúa igual, hoy le quitarán la medicación y la respiración asistida», continuaron. De todas maneras, hay que esperar todavía unas horas más «para comprobar que el ventrículo sigue funcionando bien».

El propio Juan Carribero comunicó ayer a sus conocidos mediante correo electrónico cómo fue la operación de ayer. «Cuando el cirujano empezó la operación de Fonrán y llegó al corazón, retiró unas venas que eran inservibles y la sorpresa fue que el ventrículo que tenían que quitarle empezó a funcionar. Al final no ha hecho falta que le practiquen la técnica de Fontán», indicó el padre desde la clínica estadounidense. La sangre empezó a circular correctamente y el nivel de oxígeno del pequeño comenzó a subir. «El doctor Pedro del Nido es el mejor cirujano del mundo», insistió Juan.

Entre lágrimas

La tensión acumulada en los últimos meses y, sobre todo, en las horas previas a la intervención de Marcos, afloró cuando el médico informó a los padres del proceso y del estado de salud de su hijo al término de la operación: «Empezamos a llorar y le pedí que si podría darle un abrazo muy fuerte. Él me respondió que por supuesto», contó Juan. «Estamos súper contentos con la respuesta de nuestro campeón. Ha vuelto a nacer», añadió el padre.

Para que Marcos, de siete años, pudiera desplazarse hasta Boston y recibir este tratamiento médico ha sido necesaria una campaña de recogida de fondos que ha movilizado a toda la ciudad. Se han celebrado hasta ahora cenas benéficas, mesas petitorias, partidos de fútbol solidarios y un sin fin de actividades con el único objetivo de colaborar con la familia para la curación del pequeño.