
El arresto de Assange descabeza Wikileaks
El fundador de la polémica web estará en prisión en Reino Unido hasta que se estudie su extradición a Suecia por delitos sexuales
LONDRES. Actualizado: GuardarLos abogados de Julian Assange, fundador y director del sitio de Internet Wikileaks, que ha entregado a varios diarios cables confidenciales de la diplomacia de EE UU, preparaban anoche un recurso a su encarcelamiento preventivo, dictado por un magistrado británico que ha recibido la petición de extradición por las autoridades suecas, que investigan acusaciones de delitos sexuales contra el periodista australiano.
El juez Howard Riddle, del tribunal de la City of Westminster, que tramita en primera instancia las demandas de extradición, aceptó argumentos de la Fiscalía para que Assange no fuese puesto en libertad por la gravedad de las acusaciones y el riesgo de que decida no comparecer ante los tribunales por los «comparativamente leves lazos» que le unen con la sociedad británica y el acceso a fondos suficientes para financiar su huida.
Aunque Riddle citó a las partes para el próximo día 14 con el fin de estudiar la información adicional que enviarán las autoridades del país nórdico, y en esa vista se puede reconsiderar la solicitud de libertad bajo fianza, los abogados de Assange pueden presentar en las próximas horas un recurso, tanto en la instancia londinense como en el Tribunal Superior, para que se derogue la decisión de mantener a su cliente en prisión hasta que concluya el proceso.
Un responsable de Wikileaks afirmó ayer que la publicación de unos 250.000 cables diplomáticos en su sitio de Internet y en varios periódicos de Europa y EE UU seguirá su curso. Ayer, Visa y Mastercard anularon la cuenta utilizada para el pago de donaciones a la polémica web, en un nuevo episodio de las cancelaciones de cuentas y servicios que empresas como Amazon, PayPal o un banco suizo, entre otras, han llevado a cabo en los últimos días.
Julian Assange, de 39 años, se entregó ayer por la mañana a la Policía de Londres después de que sus abogados fuesen informados el lunes de que Scotland Yard había recibido la euroorden de arresto de un tribunal de Suecia. El acusado había ofrecido públicamente y a través de sus defensores responder a los investigadores del país escandinavo desde la capital británica. Tras ser conducido al tribunal que verá la demanda en primera instancia, Assange compareció poco después de las dos de la tarde para reconocer que él era la persona buscada, ofrecer un apartado postal y una casa en la ciudad de Victoria, en Australia, como direcciones. Pero sus abogados hicieron llegar al juez privadamente los datos de la vivienda en la que ha residido en las tres últimas semanas tras pasar dos meses en un club de periodistas de la capital británica.
Relaciones posteriores
El fundador de Wikileaks fue presentado con los cargos de coerción y acoso sexuales por los que se le investiga. Se basan en las denuncias de dos mujeres que acudieron juntas a una comisaría de Estocolmo para afirmar que, aunque iniciaron sus relaciones sexuales con él de forma consentida, en los días 14, 17 y 18 del pasado agosto, Assange utilizó en uno de los casos la fuerza de su cuerpo para mantener sexo sin preservativo contra el deseo explícito de su pareja. Y aprovechó, en el otro, que la chica estaba dormida para iniciar de nuevo el acto sexual sin condón.
La acusación fue inicialmente rechazada por la Fiscalía de Estocolmo, pero el caso fue reabierto semanas más tarde. Según una investigación del diario 'Daily Mail', al menos una de las mujeres que acusa a Assange mantuvo relaciones sexuales con él, que vivía en su casa, después de la comisión del posible delito y entabló la denuncia solo cuando tuvo conocimiento de lo ocurrido con la otra chica, cuando esta se puso en contacto con ella.
Aunque los casos por euroorden no exigen el análisis de las pruebas que tienen las autoridades que la emiten, el juez Riddle afirmó que espera recibir información adicional. El abogado de Assange, Mark Stephens, afirmó, tras la vista de ayer, que en ausencia de pruebas concretas sobre los delitos de los que se acusa a su cliente es difícil elaborar un recurso bien fundado contra la orden de mantenerle en prisión.
Las euroórdenes, creadas en el marco de la cooperación judicial de la UE para evitar la prolongación de los casos de extradición que permitía el viejo convenio europeo, tienen un plazo orientativo de resolución de sesenta días y sus fallos son abrumadoramente favorables a la demanda. Pero Reino Unido incorporó la decisión marco de la Unión estableciendo un derecho automático de recurso contra el fallo en primera instancia, por lo que los casos polémicos raramente cumplen con ese plazo.