juicio en la AUDIENCIA

El agente acusado de abusar de sus hijas niega que las violara

El policía aseguró hoy durante el juicio que está en el banquillo "por un interés económico". Una de las víctimas declaró que también había sufrido abusos de su hermano

CÁDIZ Actualizado: Guardar
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El agente del Cuerpo Nacional de Policía acusado de los presuntos delitos de malos tratos, amenazas y otros dos de abusos contra sus dos hijas cuando eran menores de edad, ha negado hoy ante el juez que cometiera tales hechos.

Durante la sesión del día de hoy en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Cádiz el policía ha asegurado que lo que hay detrás de todo el caso "es un interés económico”. Ha explicado que un mes antes de que lo denunciaran mantuvo una fuerte discusión con su mujer por temas de dinero.

Por su parte, la que fuera su esposa ha reiterado durante el juicio que sufrió humillaciones y fue maltratada por el acusado.

También han prestado declaración las dos hijas de 26 y 30 años. La mayor ha explicado a raíz de las supuestas agresiones que padeció anorexia porque, según sus palabras, "quería desaparecer parecer por eso dejó de comer". La menor ha subrayado que su padre la violó reiteradamente al igual que su hermano mayor, a quien no denunció porque se fue de casa.

Tras declarar las dos hijas, tomó la palabra la abuela y ex suegra del acusado quien admitió haber presenciado el maltrato y las humillaciones hacia todos los miembros de la familia, en especial hacia la hija mayor del matrimonio. "Nos insultaba, nos faltaba el respeto y nos amenazaba con matarnos", contó la testigo quien explicó que realizó su primera declaración bajo el miedo de que el policía acabara con sus vidas.

Después de ella, testificaron por parte de la acusación particular, dos psicólogas que trabajaban en el Instituto de Medicina Legal en 2007 y el médico forense. Las dos expertas explicaron que el cuadro que presentaban las denunciantes eran totalmente "compatible" con el de mujeres maltratadas.

La sesión se alargó hasta bien entrada la tarde con los primeros testigos de la defensa. Dos compañeros del cuerpo de la Policía Nacional. El primero de ellos negó haber presenciado ningún episodio de violencia en la familia y afirmó que el día que fue el acusado a recoger sus cosas del domicilio "varios hijos se abrazaron a él, llorando y sintiendo su marcha". El otro compañero relató una denuncia por parte de la hija sobre posibles abusos de un desconocido y afirmó no saber más acerca de la familia.

La Fiscalía pide al tribunal 24 años de prisión, de los cuales, 14 se corresponden con la violación a una de las niñas y dos años, por el maltrato familiar. Además, el Ministerio Público solicita que se le imponga, al acusado, una orden de alejamiento de sus hijas de 19 y 24 años, que le prohíba acercarse a ellas a menos de 500 metros; y una indemnización para las dos jóvenes y la madre de 36.000 euros para cada una, por los daños morales.