Familias jerezanas se interesan por un programa que impulsa la acogida de menores

El delegado de Bienestar Social y del Mayor, José Manuel Jiménez, ha participado en la presentación del Programa Acógeles de la Asociación Andaluza de Centros Católicos de Ayuda al Menor (Accam). Purificación Díaz Triviño, presidenta de Accam; Agustín López, jefe de servicio de Centros de Protección, y Juan Vizuete, coordinador del programa, fueron los encargados de presentar al público que se dio cita en la Escuela de Hostelería los objetivos de este programa, dirigido a familias que desean acoger a menores ingresados en centros de protección.

Jiménez felicitó la puesta en marcha de esta iniciativa y recordó que el Ayuntamiento colabora con la Junta de Andalucía y la Justicia en la prevención y protección de los menores. «Es bueno que se ofrezcan más medios, más recursos, porque las administraciones no siempre llegamos a todos los sitios. Siempre he defendido la colaboración entre lo privado y lo público», manifestó. El delegado se mostró partidario de que estos menores sean acogidos, porque «el cariño que necesitan lo van a encontrar en el entorno familiar», añadió.

López recordó que se trata de menores que no pueden estar con sus familias y a pesar de que los centros de protección han cambiado muchísimo, gracias a la profesionalidad y los equipos técnicos, «no se puede suplir con un centro la labor de una familia y la relación que se establece con la misma», dijo tras elogiar el trabajo de Accam.

Sacarlos del centro

Díaz Triviño y Vizuete, por su parte, coincidieron en afirmar que «en ocasiones el centro no es el recurso ideal» porque el menor «no acaba de procesar su situación anterior». Es por ello que el Programa Acógeles tiene por objeto la búsqueda de familias interesadas en acoger y educar a menores que están en centros. Estas familias son entrevistadas por un equipo técnico compuesto por trabajadores sociales, educadores y abogados. Tras una sesión informativa del contenido del programa, la solicitud de acogida se hace llegar al Servicio de Protección de Menores.

A continuación, la familia de acogida recibe un curso de formación y es sometida a un estudio de idoneidad para seguidamente ser incluida en un registro. Después de una fase de acoplamiento entre la familia y el menor, se formaliza el acta de acogimiento y se inicia un seguimiento para que el acogimiento sea satisfactorio.