Un dedo acusador que señala al Ayuntamiento
Actualizado:La iniciativa deja al descubierto una acusación general que, nada velada, señala, desde los promotores, al Ayuntamiento. Y es así tanto si se indica el estado de suciedad del casco histórico como si de edificios de los siglos XV al XIX poco o nada protegidos se trata. Incluso si se quisiera echar balones fuera con el ánimo de una exculpación a costa de competencias que no se tengan tienen respuesta. Y un ejemplo puede estar, por ejemplo, en la iglesia de San Mateo: «Es un bien de interés cultural y se incumplen exigencias de esa declaración como evitar la contaminación visual que supone tener esos contenedores junto a esta joya de templo». Hasta en el terreno de las rehabilitaciones y reconstrucciones proponen reproches, como formulan al respecto de la casa de calle Abades.