Diez empleados de Opel resultan heridos graves al volcar el autobús en el que volvían a Zaragoza tras acabar el turno

Aparatoso siniestro en Zaragoza que ha dejado un saldo de diez heridos graves y once de carácter leve. Todos han sido trasladadas a los hospitales Clínico Universitario, Universitario Miguel Servet y Royo Villanova de la capital aragonesa como consecuencia del accidente de tráfico sufrido por un autobús en la autovía A-68, a la altura de la Estación Intermodal de Zaragoza. En el autocar viajaban 38 empleados que había terminado su turno en la fábrica de General Motors en Figueruelas y se dirigían al centro de la ciudad.

José Juan Arceiz, presidente del comité de empresa de GM en Figueruelas, ha explicado que los heridos sufren cortes, distintas contusiones y roturas de diversa índole, aunque ha adelantado que no se teme por la vida de ningún trabajador. Las heridas más graves las tiene el conductor del autobús, de la empresa Therpasa, que presta el servicio de transporte de trabajadores de la multinacional automovilística.

Caída de seis metros

A los 38 trabajadores les sorprendió el accidente cuando regresaban a casa tras cumplir con el turno de noche en la factoría de GM en Figueruelas, a una treintena de kilómetros de Zaragoza. La Policía Local investiga las causas del siniestro, en el que el autobús se precipitó desde una altura de unos seis metros a uno de los túneles de acceso a la estación intermodal Delicias de la capital aragonesa. El autobús rompió la valla de protección de la calzada y cayó para estrellar su frontal contra el suelo.

El vicealcalde de Zaragoza, Carlos Pérez Anadón, ha asegurado que a pesar de la gravedad del siniestro, ocurrido poco después de las 07:00 horas, ha sido una "verdadera suerte" que no se hayan registrado víctimas mortales. La normalidad ha vuelto a la zona donde se ha producido el accidente del autobús, que ha sido retirado por una grúa y que ha resultado con importantes daños en el frontal del vehículo, que cayó sobre sus ruedas sin llegar a volcar.