La UEFA expedienta al Real Madrid por «conductas impropias»

La UEFA anunció este jueves la apertura de un expediente disciplinario al Real Madrid por “conductas impropias” del técnico José Mourinho y de sus jugadores Sergio Ramos, Xabi Alonso, Iker Casillas y Dudek en el choque disputado el miércoles en el Ámsterdam Arena, correspondiente a la quinta jornada de la fase de grupos de la Liga de Campeones.

El caso, que podría acarrear una sanción de uno a tres partidos a los profesionales investigados y una multa económica, se tratará en la reunión de la Comisión de Control y Disciplina de la UEFA prevista para el próximo martes, 30 de noviembre. También se analizará entonces el comportamiento del técnico rumano Sarin Cartu, entrenador del Cluj que perdió los estribos y rompió a patadas un lateral de su banquillo en la derrota ante el Basilea.

Para analizar si pudo haber conducta antideportiva en las expulsiones por doble amarilla de Xabi Alonso y Sergio Ramos, que no jugarán el intrascendente choque ante el Auxerre y, si la UEFA no indica lo contrario, pasarían a octavos sin riesgo de sanción, los juristas tendrán en cuenta tanto el acta del partido, elaborada por el colegiado escocés Craig Thomson, como el vídeo del partido.

Aunque este tipo de tretas siempre son difíciles de demostrar, el contenido de las imágenes preocupa al Real Madrid. Las cámaras captaron primero los cuchicheos entre Mourinho y Chendo, el delegado del equipo. Después, Dudek se acercó a la portería de Casillas –el reglamento prohíbe a los suplentes abandonar el área técnica salvo para calentar en la banda- y le comentó el algo. Luego, el guardameta de la selección susurró en el oído a Sergio Ramos, y el defensa se lo comunicó a Xabi Alonso.

A tres minutos del final, el centrocampista demoró en exceso el lanzamiento de una falta y vio la segunda amarilla. Y en el tiempo añadido, el defensor hizo lo mismo en un saque de puerta que normalmente ejecuta el portero. Mourinho, Casillas y el resto de los jugadores negaron toda componenda al final del encuentro. “Las tarjetas no me han gustado, porque también queremos ganar al Auxerre", llegó a manifestar el preparador.

Estas artimañas son consustanciales al fútbol de alto nivel, pero la reiteración, lo obvio de la maniobra y la dimensión del club implicado y de la competición han avivado la polémica. El último precedente de algo similar ocurrió 2008, cuando los jugadores del Olympique de Lyón Juninho Pernambucano y Cris ‘se ganaron’ la amarilla en un encuentro ante la Fiorentina. Entonces, la sanción fue solo económica, con una multa de 10.000 euros que para los futbolistas blancos es calderilla.