Medio siglo de entrega al prójimo

El templo lleno a rebosar, acto conmemorativo que desabrochó el brocamantón de los recuerdos, remembranza de una ardua labor a favor de los desfavorecidos, fontanas de alegrías compartidas. Celebración, este pasado domingo, de un acontecimiento digno de la más atronadora ovación: 50 años de Cáritas de San Rafael. Presidió y ofició la ceremonia el obispo de Jerez monseñor José Mazuelos, además del párroco Salvador Marín. Estuvo igualmente presente el padre paúl Segundo Peña Izquierdo CM. Ambiente de excepción, tributo a manos llenas. Toda vez concluyera la Eucaristía, y segundos antes de la despedida final, se procedió a la lectura de un oficio mediante el cual el Ayuntamiento acepta la solicitud de la feligresía -y de otros estamentos locales- en aras de la designación de una plaza anexa a la parroquia con la titularidad del nombre del padre Antonio Valdivielso Nogal (afirmación que desatara la tácita felicidad de toda la concurrencia). Antes del ágape servido en los salones parroquiales se descubrió -inaugurando públicamente su instalación- un azulejo conmemorativo de tan señalada efemérides. Ni que decir tiene que tampoco faltaron ni tarta de cumpleaños ni tampoco las muestras de gozo por la mencionada concesión de una plaza a la memoria del siempre recordado padre Antonio. Un hombre que, al decir del periodista Manuel Sotelino, «nos marcó claramente a muchos jóvenes que allí echamos los dientes».