Las provocaciones de Kim Jong-il
No es la primera vez que Pyongyang intimida a sus vecinos lanzando misiles o detonando bombas atómicas
HONG KONG Actualizado: Guardar¿Provocación intencionada, intercambio de disparos accidental o ensayo fallido? No es la primera vez que los misiles de Kim Jong-il sobrevuelan territorio surcoreano. En anteriores ocasiones fue solo un susto, pero esta vez ha estallado la tensión en la última frontera de la Guerra Fría por el ataque más grave del Norte contra la población civil del Sur.
En abril del año pasado, el régimen estalinista dirigido por el 'Querido Líder' Kim Jong-il amargó a la OTAN la cumbre para la celebración de su 60 aniversario disparando un misil de largo alcance encubierto bajo la puesta en órbita de un satélite de comunicaciones. Al parecer, se trataba de un misil intercontinental Taepodong-2 con capacidad para recorrer 10.000 kilómetros, que podría ser armado con una cabeza nuclear y en teoría sería capaz de llegar a Hawai y golpear las costas de Alaska.
Según Estados Unidos, Corea del Sur y Japón, dicha prueba fracasó porque el cohete se estrelló junto a su carga en el Océano Pacífico, pero demostró la mayor capacidad ofensiva de los Taepodong-2 al recorrer más de 3.000 kilómetros. En un ensayo anterior que tuvo lugar en la víspera del 4 de julio de 2006, dicho misil explotó en el aire a los 42 segundos de ser disparado junto a otros cohetes de menor potencia.
En 1998, Pyongyang dio el primer aviso de su capacidad ofensiva lanzando otro proyectil que sembró el miedo en la comunidad internacional al atravesar el espacio aéreo de Japón. Desde entonces, sus provocaciones bélicas forman parte de su agenda diplomática para perpetuar en el poder a Kim Jong-il bajo la política 'songun' de primacía militar.
Aunque Corea del Norte es uno de los países más pobres y herméticos del planeta, ha desarrollado una potente industria militar y un avanzado programa nuclear. Para disuadir a Estados Unidos de un cambio de régimen y jugar la baza de la diplomacia atómica, Pyongyang llevó a cabo su primer ensayo nuclear en octubre de 2006 y el segundo en mayo del año pasado. Poco después, y para protestar contra las nuevas sanciones de la ONU por dicha prueba, volvió a disparar una decena de misiles más en julio.
Según un informe del Instituto de Asuntos Exteriores y Seguridad Nacional de Corea del Sur, el vecino septentrional ha construido bases subterráneas de misiles en la franja oriental de su costa, por lo que dispondría de 250 cohetes apuntando a instalaciones militares de Japón, entre ellas algunas norteamericanas. El arsenal del 'Querido Líder' Kim Jong-il incluye cohetes Scud que podría lanzar contra la vecina Corea del Sur; Rodong, capaces de golpear Japón y Taepodong-2, de alcance intercontinental.