El PP reta a CiU a decir si pactará con los socialistas
Cospedal confía, pese a los sondeos, en que su partido será la fuerza clave para formar gobierno en Cataluña
MADRID. Actualizado: GuardarEl PP se puede quedar soltero y sin pretendiente en Cataluña. Mientras los sondeos sitúan a CiU al borde de la mayoría absoluta, Artur Mas coquetea con José Montilla al que podría elegir como compañero de viaje tras los comicios del próximo domingo. Los populares, no obstante, mantienen la mesura y el mismo objetivo con el que comenzaron la campaña electoral: convertirse en la formación clave para configurar el futuro gobierno catalán.
Una idea que apuntaló ayer María Dolores de Cospedal en la rueda de prensa posterior al comité de dirección del PP. La secretaria general de los populares, al igual que hizo Mariano Rajoy el pasado fin de semana en sus tres actos de campaña, mantuvo un perfil bajo en sus críticas a CiU, con una excepción. Retó a Artur Mas a que explique, antes de que se abran las urnas para votar, si ha cerrado «un pacto post electoral» con José Montilla.
Cospedal consideró que Mas tendría muy difícil explicarle a su electorado un acuerdo con el PSC, «porque el tripartito ha traído mucha pobreza a Cataluña». La número dos del PP abundó que, más allá de estas hipótesis, lo más importante es que el líder del CiU -al que todos los sondeos le dan como indiscutible vencedor- explique qué tipo de política económica va a desarrollar si llega a la Generalitat y si compartirá decisiones con el PSC como la de congelar las pensiones, en alusión al decisivo apoyo que otorgó CiU a José Luis Rodríguez Zapatero para salvar sus de ajustes en el Congreso.
La número dos de Mariano Rajoy defendió que los sondeos son útiles, pero enfatizó que lo único importante es el recuento de votos. Y Cospedal ve al PP con serias opciones de lograr una posición «fuerte y determinante», más allá de que obtengan «14, 16 o 19 escaños» -en la actualidad tienen 14-.
La responsable del PP eludió aquilatar qué análisis podría extraerse si su partido, finalmente, no remonta las encuestas y se queda con los mismos apoyos. Un hecho nada baladí si se tiene en cuenta que las catalanas serán las primeras elecciones que se celebran en España tras los efectos más devastadores de la crisis económica.
Cospedal aseveró que su partido ha centrado la campaña electoral en los «auténticos problemas» de los catalanes, es decir, en el paro, la destrucción de empresas y la inseguridad ciudadana. Negó, por lo tanto, que se lo hayan jugado todo a la carta de la inmigración.
Los periodistas pidieron a la secretaria general del PP su opinión sobre los videos de cariz sexual -incluido el juego 'caza inmigrantes'- que han calentado la campaña electoral. «Hay algo que se llama derecho al honor y la dignidad en la vida política y eso se tendría que respetar porque si no corremos el peligro de que los ciudadanos todavía se alejen más de la política», remachó.