La suerte, para el más fuerte

El Portuense dejó ir vivo a un Jerez Industrial formado por jugadores británicos salvo el español Valtierra (madrileño). Los hombres del gaditano Kike Caballero dejaron jugar al fútbol, lo que propició que se viera un bonito encuentro con intensas llegadas a una y otra portería. Hay que quedarse con los primeros 20 minutos y la segunda parte del Portuense, en la que tuvo la oportunidad de abrir la lata, lo que no pudo ser por la falta de acierto de la que vienen pecando los hombres de Paco Corbeto. Los jerezanos, que se colocan líderes con su triunfo de ayer, gustaron en el Cuvillo, siendo de lo mejor que se ha visto en las 14 jornadas que se llevan disputadas.

A medida que fueron pasando los minutos, los visitantes se fueron aclimatando a las condiciones del césped artificial y se lo iban poniendo más difícil al Portuense, que en los minutos iniciales primero José Antonio, con un tiro cruzado, y luego Pedro Curtido, con un remate de cabeza, pusieron a prueba a Lumley. Antes de la media hora, tercera y última clara para los locales por mediación de un centro chut de Lolo Prado que el portero británico tuvo que enviar a corner. Con un líder sin apenas oportunidad ý el empate a cero se llegó al descanso.

Pero lo que le faltó en los primeros 45 minutos a los industrialistas lo encontraron con algo de fortuna nada más reanudarse la contienda. Balón que pierde José Antonio por la derecha y Jordan, sin pensárselo dos veces, desde más de 30 metros engancha un chut que sorprende a todos, colándose el cuero como un obús en la puerta de Edu Villegas, que nada pudo hacer.

El Portuense no se desajustó y continuó con las riendas del juego. Dos minutos más tarde la ocasión le vino a Abel Calatayud, que Lumley la detuvo en tres tiempos. El gol del Portuense, aunque no llegó, sólo parecía cuestión de no desanimarse. Todos probaban suerte, delanteros o defensas, como Carli, que subía al ataque. En el 59' la tuvo de cabeza, y en el 67' también por alto se le anula un gol por posible falta. A los 69 minutos, el Industrial se ve en inferioridad numérica por expulsión de Lampe, lo que podía facilitar más la labor local. Un minuto antes de esa incidencia había salido al campo Peces, yéndose al vestuario Lolo Prado. Se perdió a un hombre para los lanzamientos de falta directa pero se ganó altura con el conileño arriba, como ocurrió en Sanlúcar. Pero la fortuna no estuvo de lado rojillo.

Incluso el triunfo de los visitantes, con un hombre menos, pudo ser más abultado, al irse el Portuense arriba quedando la defensa desguarnecida. Valtierra tuvo en los minutos finales la oportunidad de sumar algún gol más pero no lo consiguió.