«No sé lo que es vivir sin estar a dieta»
Actualizado: Guardar«Peso 108. Y aquí donde me ves he perdido 22 kilos...». Mari Carmen Louzao, de 57 años, no sabe lo que es no estar a dieta. «Con quince años pesaba 72 y en agosto del año pasado estaba en 130. No podía ni levantar los 'Tupperware'. Tenía el corazón muy mal. Y el hígado. Me dieron dos años de vida». Su sobrepeso no la ha retirado de su trabajo como vendedora por catálogo de los famosos recipientes, cuya interminable lista de variedades sólo es comparable a las dietas que ella ha seguido a lo largo de los años. «La de los puntos, la de las hierbas, la de los batidos...». Un producto que acompañaba a cada ingesta de comida -sólo verduras verdes y una porción de 150 gramos de carne o pescado- y cuya dosis le costaba tres euros. «Y eran cuatro todos los días. No podía seguir pagando eso». Pero su perfil no es el de persona gruesa por los malos hábitos sino por su metabolismo. «El endocrino dice que no se desarrolló y que todo lo que como lo almacena. Como los indígenas».