La abogada de Ashtiani, detenida por no observar el código de conducta
El tema de la lapidación de la iraní ha abierto una agria polémica en el seno del régimen iraní, con declaraciones contradictorias entre el Ejecutivo y el Poder Judicial
TEHERÁNActualizado:Sara Sabbaghiyan, la abogada de Shakineh Mohammadi Ashtiani, la mujer acusada de adulterio que podría ser lapidada en Irán, fue detenida por no observar el código de conducta de la República Islámica, confirmó el fiscal general de Teherán, Abas Jafari Dolatabadi. En declaraciones divulgadas anoche por la agencia de noticias local Mehr, el responsable iraní aseguró que la letrada fue arrestada junto con otros cuatro abogados por razones de seguridad y por no observar el código de conducta de la República Islámica.
"Tres de los abogados fueron detenidos en el aeropuerto Imán Jomeini a su regreso al país en un vuelo procedente de Altaya, Turquía. Los dos otros dos están relacionados con ellos y fueron arrestados en Teherán", explicó Dolatabadi, sin proporcionar más detalles. En un correo electrónico enviado a la agencia Efe, el primer abogado de Ashtianí, Mohamad Mostafeí, ahora exiliado en Noruega, había denunciado la detención de sus colegas. El letrado aseguró que su compañera, Sabbaghiyan, actual abogada de Sakineh, fue arrestada junto a la letrada del propio Mostafaei, Mryam Kiyan, y una tercera abogada, Maryam Karbasi, en el aeropuerto Imán Jomeini, en las afueras de Teherán.
El caso de Ashtianí, de 43 años, salió a la luz el pasado verano cuando Mostafei reveló que, tras agotar todas las vías legales y en un proceso poco transparente, la mujer había sido condenada por adulterio y que sería apedreada hasta la muerte. La pena despertó una oleada de duras críticas y protestas internacionales, lo que obligó al régimen iraní a suspender la sentencia y afirmar que se encuentra bajo revisión. El proceso ha abierto, igualmente, una agria polémica en el seno del régimen iraní, con declaraciones contradictorias entre el Ejecutivo y el Poder Judicial, que ponen de manifiesto la fractura política y social que atraviesa el país.
Campaña de desprestigio
El presidente Mahmud Ahmadineyad ha declarado en varias ocasiones que no existe aún tal condena a muerte y que se trata de propaganda occidental en contra de Irán. Sin embargo, la Judicatura insiste en que ha quedado demostrado que Ashtiani participó en el asesinato de su marido y cometió adulterio, por lo que debe ser condenada a morir en la horca por el primer delito y a ser lapidada hasta la muerte por el segundo. Semanas atrás, el portavoz del Poder Judicial y fiscal general del Estado, Gholam Husein Mohseni Ejaei, llegó incluso a afirmar que la sentencia ya había sido dictada y que la mujer sería ahorcada ya que el delito de asesinato prevalece sobre el de adulterio.
Semanas atrás, el portavoz del ministerio iraní de Asuntos Exteriores, Ramin Mehmanparast, acusó a Occidente de utilizar el caso como una mera excusa para orquestar un campaña de desprestigio a Irán. En declaraciones divulgadas por la prensa estatal, el funcionario denunció que EEUU y la UE "han convertido a una criminal en una víctima frente a los derechos humanos". "Están tan avergonzados que han transformado el caso de Ashtiani, quien ha cometido un crimen y una traición, en un caso de derechos humanos para usarlo únicamente en contra de nuestra nación", aseveró Mehmanparast.