La Policía custodiaba ayer los exteriores de la sede central de los conservadores en Londres tras los disturbios del miércoles. :: AFP
Economia

El Reino Unido aborda la mayor reforma del sistema de desempleo

Los parados que rechacen tres ofertas laborales perderán las ayudas, que se integrarán en un subsidió único en 2013

LONDRES. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El Gobierno británico presentó ayer el Libro Blanco de lo que pretende ser la mayor reforma del sistema de Seguridad Social tras la Segunda Guerra Mundial. El Ejecutivo tiene dos objetivos centrales: simplificar el sistema y fomentar que las personas que cobren el subsidio emprendan una búsqueda activa de empleo.

La propuesta se transformó en polémica al desvelarse que los parados que rechacen hasta tres ofertas consecutivas de trabajo perderán los beneficios sociales durante tres años. El promotor de esta gran reforma es Ian Duncan Smith, que fue líder del Partido Conservador, y ahora es el responsable de la cartera de Trabajo y Pensiones. El Gobierno prevé que con el nuevo sistema unos 2,5 millones de ciudadanos británicos verán aumentar sus ingresos y que el número de familias que no trabajan se reducirá en 300.000. El Reino Unido tiene uno de los más altos índices de Europa de familias en las que no trabaja ningún miembro: 1,9 millones de niños viven en estos hogares.

El proyecto recoge castigar con la retirada de subsidios a quien no cumpla ciertas condiciones como la disposición a entrevistas de trabajo, la asistencia a reuniones para mejorar su posición para encontrar empleo, seguir cursos de formación y también la obligatoriedad de empleos que devuelvan al receptor a las disciplinas del trabajo. Antes de la crisis económica había 4,5 millones de personas que recibían subsidios. A día de hoy, con cinco millones de desempleados que reciben subvenciones del Estado, hay 450.000 empleos en oferta. Y entre los que están parados y recibiendo subsidios hay 1,4 millones que viven así desde hace por lo menos diez años.

«No podemos permitir que alguien que se levanta de la cama y se va a trabajar duro, termina ganando menos que alguien que no da golpe», dijo el primer ministro, David Cameron. El objetivo de esta medida es reducir el fraude, que se estima en torno a los 135.000 millones de euros anuales.

El Ejecutivo de Cameron también quiere simplificar un sistema en el que hay más de 30 tipos diferentes de subsidios o reducciones fiscales, que administran departamentos, ayuntamientos o ministerios. La consecuencia de este complejo entramado son errores y fraudes con un coste de 8.000 millones de euros en 2009.

El Gobierno quiere integrar, a partir de octubre de 2013, a todos los nuevos solicitantes en un nuevo sistema se subsidios, pagado por un organismo único. Cuatro años más tarde todos los receptores habrán sido transferidos al nuevo sistema. Además de pretende primar la incorporación al mercado laboral rebajando las reducciones -ahora de hasta el 95%- de las ayudas a los desempleados que tienen un ingreso por trabajo temporal.